"Para mí no voy a tener contracciones, voy a tener olas uterinas. Viene la ola, la cojo y la surfeo. La naturaleza me da unos minutos para estar tranquila, relajarme, y luego coger otra ola. A lo mejor no me tengo que poner epidural". Así de convencida se muestra Cristina Pedroche a la hora de hablar de cómo prevé su parto.

La presentadora confía plenamente en una novedosa técnica que le permite a las mujeres dar a luz de manera natural y relajada, el hipnoparto. Se trata de ir disminuyendo el dolor y la ansiedad durante el parto. Y no, "no consiste en que nadie te hipnotiza. Consiste en controlar tu respiración y hacer mucha meditación", matiza.

La presentadora Cristina Pedroche EP

Control 

En realidad, se trata de controlar el dolor, mediante la relajación y utilizando herramientas cognitivas para minimizar la percepción del dolor. El proceso del hipnoparto se basa en la enseñanza de técnicas de relajación profunda, visualización y respiración, que permiten a la mujer prepararse para el parto de manera más efectiva y cómoda.

Para prepararse para ese momento, en las sesiones previas al alumbramiento las mujeres practican técnicas de concentración y respiración, lo que les permite aumentar la percepción de control sobre la situación y minimizar la percepción del dolor. ´

Estrés 

Otra de las ventajas que ofrece el hipnoparto es que reduce los niveles de ansiedad y estrés, lo que puede prevenir complicaciones durante el parto. Muchas veces el estrés asociado al parto puede provocar un mayor dolor y dificultades en el proceso, por lo que mediante esta práctica se puede reducir este estrés para lograr una experiencia más relajada.

Una mujer observa a su bebé tras un parto CG

Además de un menor uso de la medicación para el dolor y la anestesia, el hipnoparto también puede ser beneficioso para ayudar a los bebés a nacer en un ambiente de mayor calma y bienestar. La idea es que, si la madre está más relajada, el bebé también tendrá menos estrés en el proceso.

Implantación

En España, el hipnoparto ha empezado a extenderse con cada vez mayor fuerza, aunque todavía no es del todo conocido. Hay ciudades, como Madrid y Barcelona, que cuentan con diversas clínicas especializadas en esta técnica, y cada vez están surgiendo más opciones para las mujeres que quieren acudir a ellas para recibir formación y apoyo antes, durante y después del parto.

En definitiva, esta técnica es una alternativa interesante y natural pero sus defensores advierten de que no es para todo el mundo, sobre todo si hay alguna complicación o se presenta un parto de alto riesgo. Y es que, para un momento como este, el control médico debe ser uno de los aspectos más importantes a considerar.

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