Vuelve el movimiento 'No al 5G' a Barcelona durante el estado de alarma

Las reded 5G están en el punto de mira estos días en medio de la crisis sanitaria que ha provocado el Covid-19. Así, mientras en Reino Unido se han llegado a quemar antenas 5G porque, según una iniciativa sin fundamento científico, progagan el coronavirus, ahora en Barcelona se reclama una moratoria al despliegue de las redes de quinta generación, como habrían hecho otros países europeos como Suiza. 

Bajo la autoría de “La consciencia colectiva”, este miércoles han aparecido algunos carteles por la ciudad de Gaudí con una petición directa: frenar el despliegue del 5G.

Movimiento anti 5G

¿Los motivos? Según apuntan los responsables de estos carteles, la tecnología 5G no es un servicio esencial. “Sabemos que la contaminación electromagnética que generan estas redes pondrán en peligro nuestra salud provocando la debilitación del sistema inmunitario que creará un malestar general y un aumento exponencial de diferentes enfermedades”, reza el póster, que hace alusión a “muchos científicos” para sustentar su rechazo a estas nuevas tecnologías.

En concreto, este movimiento pide a los ciudadanos que viven en Barcleona salir este miércoles 15 de abril a las 20:30 horas a los balcones, tras el aplauso habitual a los sanitarios, para gritar “No al 5G”. “Crea carteles, pancartas, coge tu instrumento musical y usa tu voz para gritar No al 5G”, matiza el escrito.

Un cartel anti 5G visto en la ciudad de Barcelona / CG

Un llamamiento al consistorio

No obstante, tras ponerse este medio en contacto con conocedores del despligue de la red 5G en Barcelona, algunas fuentes apuntan a que no es la primera vez que se ven carteles de este tipo en la ciudad y que se han convocado protestas similares otras veces, rechazando el despliegue del 5G, pero sin hacer mucho ruido.

En este caso, a las 20:30 horas podrá conocerse y escucharse el alcance de este movimiento que busca llamar la atención del Ayuntamiento de Barcelona al que culpan de convertir la capital catalana en el primer banco de pruebas de esta tecnología "tan cuestionada".