Lleva más de 30 años haciendo caricaturas y, ahora, como sucede en tantas profesiones creativas, se enfrenta a la amenaza de la inteligencia artificial (IA). Sin embargo, Joan Vizcarra, que ha trabajado para cabeceras como El Jueves, Interviú y El Periódico, entre otras, y que ha perdido la cuenta de los dibujos que ha realizado, miles, confía en que el trabajo artesanal de los artistas “tendrá más valor” y resistirá a las máquinas.

En conversación con Crónica Global, reconoce que cada vez hay menos caricaturistas que trabajen los originales a mano, por lo que incluso se revalorizará el trabajo realizado “de manera artesanal con lápiz, acuarela…; el soporte físico siempre tendrá su importancia”. Y los trabajos hechos así, dice, quedan “más naturales”.

Observar

En su caso, añade, que le “gusta” guardar el máximo de obras debido a esa artesanía y al tiempo que le dedica a cada una de ellas.

Y es que él, como otros caricaturistas y dibujantes y pintores, hace algo que no puede realizar la inteligencia artificial: observar para crear. “Todas las caricaturas las trabajo desde la observación y estudio del personaje, con buena documentación y dibujos previos, bocetos, antes del definitivo”, confiesa.

Ana Botín, presidenta de Banco Santander JOAN VIZCARRA

Humor y análisis psicológico

Además, desvela, su trabajo se basa en dos aspectos de relieve: “Tratar de hacer un dibujo humorístico, deformando de manera equilibrada e inteligente, y captar el alma” del modelo, más bien como realizar un “análisis psicológico” de la figura. Una doble tarea que el algoritmo todavía debe aprender.

Vizcarra, que defiende que “todo el mundo tiene su caricatura y es perfectamente caricaturizable”, explica que en el mundo actual hay “muchos personajes” que se prestan a pasar por su folio –como ha hecho, durante tantos años, con políticos, deportistas, cantantes, actores…–: Donald Trump, Nicolás Maduro, Lamine Yamal, Mbappé… “En realidad siempre aparecen nuevos personajes interesantes”, concluye.

Noticias relacionadas