'La contra etiqueta. Lo que se ve y lo que se bebe', da voz al gremio de  Vinyataires Lliures

'La contra etiqueta. Lo que se ve y lo que se bebe', da voz al gremio de Vinyataires Lliures CLARA ISAMAT

Creación

‘La contra etiqueta’ del mundo del vino: las otras realidades que no se ven

La directora Clara Isamat da voz, en su último documental, a los pequeños viticultores que defienden una manera artesana, cercana y honesta de elaborar caldos, más allá de las denominaciones de origen

28 octubre, 2023 23:30

Noticias relacionadas

Es difícil encontrar un producto tan arraigado a nuestra tierra, a nuestra idiosincrasia y a nuestra historia como el vino. Existen evidencias de la riquísima tradición vitivinícola en la península ibérica que datan aproximadamente del 1.100 a. C. Siglos y siglos de cultivo de la vid, de elaboración y producción controlada. En la actualidad, el sector es una industria global muy poderosa, competitiva y bastante lucrativa, al menos, para algunos. Pero existen otras “realidades del mundo, de los mundos del vino”, sostiene Clara Isamat, documentalista y directora de La contra etiqueta. Lo que se ve y lo que se bebe, el documental seleccionado para inaugurar el Most Festival Internacional de Cine del Vino que tendrá lugar, del 2 al 12 de noviembre, en Vilafranca del Penedès.

Hacía tiempo que le rondaba la idea de hablar sobre el papel actual de las DO. “Para mí están totalmente fuera de línea de lo que está pasando. No solo hay un mundo del vino. Desde el industrial al más artesanal hay un abanico de mil posibilidades”, explica a Crónica Global. Sin embargo, estas “agrupaciones privadas” a través de sus consejos reguladores, y con el beneplácito de los organismos públicos competentes, son las únicas que llegan al público generalista, copando no solo la totalidad del mercado, sino apropiándose además de las toponimias, de los nombres, de las añadas.

La documentalista, sumiller y fotógrafa Clara Isamat

La documentalista, sumiller y fotógrafa Clara Isamat ELENA CARRERAS

Reivindicar su singularidad

Las denuncias impuestas por la Administración a dos pequeños bodegueros de Tarragona, Dasca Vives y Ficaria Vins, por especificar en sus etiquetas el lugar de producción, pese a no pertenecer a la DO correspondiente, le proporcionaron a Isamat el hilo conductor del documental, la “manera de criticar, de opinar a través de otras realidades, otras historias”.

Precisamente una de esas historias, la de Vinyataires Lliures (una asociación de pequeños viticultores de Cataluña que elaboran fuera de las DO), surgió por la necesidad de defender sus derechos a raíz de estas dos demandas. Y es que, como bien apunta la directora, no puede ser que se apropien de una toponimia, los asfixien con trámites burocráticos y falta de subvenciones y que, además, sea el consejo regulador quien marque el estilo que debe tener un vino para que ellos puedan poner su sello.

Ton Mata de Corpinnat, otro de los testimonios del documental

Ton Mata de Corpinnat, otro de los testimonios del documental CLARA ISAMAT

Al final el problema es la “homogenización del gusto, de los aromas de una zona, sin permitir que se expresen otras realidades”. Por eso, desde Vinyataires Lliures demandan a la Administración la creación de un segmento especial que reconozca su singularidad. Una excepcionalidad, arraigada en la artesanía, en la cercanía, en un verdadero respeto al territorio, que no debería soportar el mismo peso burocrático que una gran empresa que produce millones de botellas al año.

Singularidades y paradojas de un sector clave

Resulta paradójico que cuando las Administraciones hablan de territorio, cuando hablan de país ensalzan, incluso reivindican, la labor del pequeño productor. Es el discurso oficial de lo políticamente correcto. La cara b de esa proclama es bien distinta. Historias como las ya mencionadas o la de los “rebeldes” de Mas Molla, que, pese a la Generalitat, han conseguido mantener vivo su pequeño negocio y conservar “una riqueza de variedades únicas en el mundo”, lo demuestran. Todas estas “realidades” son apenas un minúsculo extracto de las muchas que hay, no solo en Cataluña, también en el resto de España y en todo el mundo. 

“En Francia, que supuestamente se las dan de saber mucho de vinos, tienen el mismo problema”, afirma. El peso y la omnipresencia de ciertas denominaciones de origen deriva en situaciones tan grotescas como la ocurrida a Olivier Cousin, un viticultor de la zona de Anjou que estuvo a punto de ser encarcelado por poner en sus cajas de embalaje A.O.C (Anjou, Olivier, Cousin). Lo relata en la pieza documental el abogado penalista francés Eric Moran, quien alerta igualmente sobre lo contradictorio de que el vino sea el único producto agroalimentario que no está obligado a especificar lo que lleva. “Un alimento que además es procesado y con alcohol”, matiza la autora.

Mas Molla, los rebeldes que han logrado mantener vivo su pequeño negocio

Mas Molla, los rebeldes que han logrado mantener vivo su pequeño negocio CLARA ISAMAT

“Una nueva revolución verde”

La contra etiqueta. Lo que se ve y lo que se bebe ha contado, entre otros, con la participación de Tono Mata, presidente de Corpinnat, una marca comercial que agrupa productores catalanes de cava al margen de la denominación de origen; de Mikel López Iturriaga o de Silvia Naranjo y Jordi Alcover, artífices de la Guía de Vinos de Cataluña, para los que “la cultura del territorio viene antes de aquello que llamamos cultura del vino”. Una idea que comparte Josep Roca, sumiller de El Celler de Can Roca.

Josep Roca reivindica una mirada más libre y menos encorsetada del mundo del vino

Josep Roca reivindica una mirada más libre y menos encorsetada del mundo del vino CLARA ISAMAT

Mikel López Iturriaga en el documental

Mikel López Iturriaga en el documental CLARA ISAMAT

“Cuando hablamos de vino y de gente arraigada al sistema agrario como un motor que da vida y economía desde el campo, que es el mundo del vino, sabemos que estamos hablando de un producto, de una interacción y de un diálogo de 8.000 años de historia, y las denominaciones de origen no tienen más allá de un centenar de años, siendo muy generosos, de viaje retrospectivo”, explica. El prestigioso sumiller insiste además en la necesidad de alcanzar “una mirada mucho más liberada, menos encorsetada y más vinculada a esta nueva ilustración radical, a esta nueva revolución verde”, la de los vinos honestos y coherentes con el paisaje, con el territorio.