"T'enxules" y "La mussegu": así es como el reguetón se cuela en la música catalana

Si en los años 90 el boom del rock catalán hacía vibrar las discotecas, de los 2000 hacia aquí ha prevalecido el pop indie con grupos y solistas como Els Amics de les Arts, Manel y Miki Núñez. Sin embargo, ahora el paradigma ha cambiado y la influencia urbana del reguetón y la bachata se ha colado por los renglones más ocultos de la música catalana. 

El ejemplo más claro de ello es Coti x Coti, la canción viral de The Tyets, que ya acumula más de siete millones de reproducciones en Spotify, cuatro millones en Youtube y que incluso ha conseguido colarse en la lista de Éxitos España. Una canción con una letra pegadiza y que fusiona el reguetón con, ¡oh, sorpresa!, una sardana. No podrían haber pensado en nada más catalán.

Los artistas del nuevo paradigma catalán

El éxito del grupo formado por los productores del Maresme Oriol de Ramon y Xavier Coca, y que ya tiene dos álbumes con la discográfica catalana Luup Records, no hace más que evidenciar que esta nueva forma de hacer música en catalán está en auge. La popularidad que está ganando este género se extiende incluso más allá de Cataluña, ya que el grupo actuará en Madrid el próximo 2 de diciembre. 

Pero no han sido solamente ellos los que han impulsado la música catalana fuera de sus fronteras. Mushkaa, Lildami, Flashy Ice Cream, Julieta Gracián y Figa Flawas son ejemplos de la nueva hornada de artistas del panorama musical actual en catalán. De hecho, los dos últimos junto a The Tyets decidieron colaborar en el tema Xuculatina. El buen rollo entre ellos es tal que incluso se autodenominan La banda del pati, como la serie.

@julietagracian @MUSHKA @Figa Flawas @Adriana Solana ♬ sonido original - MUSHKA

Bachata y reguetón

Una buena manera de ayudarse entre ellos y potenciar así de manera conjunta esta nueva era en la música catalana. De hecho, comparten las canciones de los otros en sus stories y hacen los trends de sus bailes en TikTok. Son tan parecidos que a veces pueden confundirse entre ellos; Figa Flawas también está compuesto por dos jóvenes, de Valls (Tarragona), Pep Velasco y Xavier Cartanyà.

Bajo el paraguas de la productora Sequoia Productions, saltaron a la fama después del confinamiento con canciones como 100graus y SECR3T. Su ritmo rumbero y su innovadora fórmula de mezclar la bachata con los sonidos catalanes evocan al buen rollo y al verano, pero precisamente han conseguido todo lo contrario: independizarse del sonido de fiestas mayores de Cataluña. ¿Y cómo lo han hecho? Con las letras. 

Letras para sentirse identificado

Aparte del ritmo bailable y reguetonero que tienen estos grupos, el secreto se encuentra en el tipo de historias que cuentan. Tal y como dicen los tuiteros, sus letras son muy relatables, es decir, que te puedes sentir fácilmente identificado con ellas. "De tota Catalunya m’has tocat a mi", "Et conec totes les destacades", o "Ja no vull començar a rallar-me si et truco i t'has canviat la foto del whats" son algunas de las frases que podrían ser perfectamente una conversación entre amigas. 

Un lenguaje muy de calle, muy joven, actual, fresco e incorrecto. Porque sí, ellos mismos admiten que escriben o dicen mal las palabras en catalán o tal cual se leen a posta, como Xuculata o Mussegu. No se limitan solamente al catalán, sino que incluso mezclan frases o palabras con el castellano y derivan en un charnego muy a la orden del día. Los gags y las referencias a las nuevas tendencias de la generación Z tampoco pueden faltar, así como la reivindicación de que las letras de reguetón no tienen que ser necesariamente machistas. 

Una manera de reivindicar el catalán

Aunque las canciones de este género son más explícitas, directas e incluso denigran a las mujeres, aquí se da un fenómeno totalmente contrario: la base alegre contrasta con las letras de desamor y de echar de menos al ser amado. Lo demuestra Julieta en temas como Clar que t’he trobat a faltar, T’enxules o Ens Besem. Con un sonido que recuerda mucho a los primeros años de Bad Gyal, la artista de Barcelona se ha hecho con el mejor disco revelación para la crítica y también de canción de autor de Enderrock.

Aun así, lo sorprendente de este nuevo género emergente es la manera que han conseguido conectar con su público objetivo: jóvenes catalanes y también gente que normalmente no escucha música en esta lengua. Porque los datos así lo indican: los jóvenes ya no lo hablan tanto catalán como antes. Pero grupos como The Tyets o Figa Flawas están demostrando que si les ponen el ritmo adecuado –una bachata o un reguetón– la generación Z está dispuesta a crear arte en catalán.