Jorge Miarnau, presidente de Comsa Corporación / CG

Jorge Miarnau, presidente de Comsa Corporación / CG

Confidente VIP

Comsa perdió 16,3 millones en 2019

El giro del grupo constructor de las familias Miarnau y Sumarroca empieza a recuperarse tras siete años de declive

7 diciembre, 2020 00:00

La dura reconversión del gigante Comsa, especialista en construcciones e ingeniería, toca a su fin. El grupo negocia desde hace meses con la banca un nuevo acuerdo para reestructurar los 190 millones que todavía le adeuda. Las conversaciones se han retrasado por la pandemia. Según fuentes de la cúpula del conglomerado, van por buen camino y se prevé que fructifiquen en un nuevo pacto próximamente.

El vasto emporio de Comsa comprende más de ochenta compañías desperdigadas por una veintena de países. Con un surtido tan variado, las incertidumbres son elevadas.

Divisas devaluadas

No obstante, la dirección de Comsa espera en 2020 un aumento de la cifra de negocio. La estimación de los resultados es compleja, debido a la amplitud de los mercados en los que trabaja.

Este año, las actividades en Brasil y México se han desarrollado sin problemas, pero la depreciación de sus monedas respecto del euro podría provocar algún que otro demérito.

Reconversión polaca

La cuenta de resultados del consorcio catalán registró en 2019 un déficit consolidado de 16,3 millones. El grueso de esa cifra obedece a la filial polaca Trackja, que contribuyó con un quebranto de 43 millones.

Esta entidad reforzó su accionariado con la entrada de un par de inversores polacos, gracias a los cuales se confía en lograr una notable mejoría de sus magnitudes.

COMSA EN CIFRAS (balance consolidado, en millones de euros)
Año Ventas Resultado Fondos propios
2019 776 -16,3 90
2018 734 -0,58 105
2017 1.085 -12,6 109
2016 1.220 -0,22 122
2015 1.130 -0,59 111
2014 1.240 -29,9 109
2013 1.570 -32 182
2012 1.710 -155 222
2011 2.080 1,9 420
2010 1.777 15 405

Actividades

Los números rojos cosechados por Comsa en 2019 son los octavos consecutivos. En cambio, la cifra de negocio, que llevaba en caída libre desde 2012, se recuperó el año pasado y subió a 776 millones.

La construcción ferroviaria le aportó 450 millones, e ingeniería y sistemas, 289. El resto corresponde a energías renovables, recogida de residuos, transporte y concesiones.

Pasivos recortados

El notable retroceso experimentado por la facturación en los últimos ejercicios se debe a la cadena de desinversiones que el grupo acometió, sobre todo en los negocios de concesiones, medio ambiente, energías renovables y logística.

Semejantes traspasos tuvieron por finalidad aligerar la carga de las deudas. Éstas llegaron siete años atrás a los mil millones. Hoy están por debajo de los 200 millones. En dicho intervalo, el grupo ha tenido que renegociar dos veces con la banca.

Accionistas

El cupo principal del pasivo restante consiste en un préstamo convertible en acciones de la propia Comsa, con vencimiento el 30 de junio próximo. Llegado el caso, otorgaría a los bancos el 50,01% del capital de la holding.

Sin embargo, fuentes del grupo explican a Crónica Global que los accionistas están en conversaciones con las entidades financieras para cancelar el citado crédito convertible. El capital de Comsa se reparte entre las sagas catalanas Miarnau y Sumarroca, que son titulares del 70% y el 30% respectivamente