Frime, la “reina del atún”, facturó 183 millones en 2022

El giro se distribuye en partes sensiblemente iguales entre el negocio doméstico y el internacional. Este último abarca más de 25 países.

Gastos disparados

El alza acontece en un año especialmente desafiante, debido a la depreciación del cambio euro/dólar, el encarecimiento exponencial del precio de la energía y los elevados niveles de inflación.

Tales factores repercutieron de forma negativa en el coste de la materia prima y los transportes.

Ganancias menguantes

Los resultados económicos arrojaron números negros, como viene ocurriendo desde los tiempos fundacionales, aunque se movieron drásticamente a la baja. El beneficio neto cayó de 5,8 a 1,7 millones.

El descenso se explica por el incremento de las amortizaciones, que casi se triplicaron hasta 6,3 millones; y el déficit financiero derivado del aumento la deuda bancaria, que se dobló hasta superar los 100 millones.

Frime financia de antiguo la compra de pescado con recursos bancarios. En el último tramo del año pasado adquirió un importante volumen de materia prima, para asegurar el suministro a sus clientes durante los primeros meses de 2023. 

Instalaciones

La entidad ha puesto en servicio dos plantas de procesamiento en el curso del último año. La más reciente, inaugurada en abril, está ubicada en el recinto de Mercabarna.

La otra instalación, sita en La Roca del Vallès, se estrenó a finales del año pasado. Consta de 8.000 metros cuadrados y ha significado una inversión de 25 millones. Permitirá atender la demanda creciente prevista para los próximos años.

Negocio mayorista

Frime vende sobre todo atún fresco, en semiconserva y congelado. Asimismo trasiega pez espada y otros productos del mar.

Los canales de comercialización son el Mercat del Peix, de Mercabarna, donde posee seis casillas propias; los clientes minoristas nacionales a internacionales; y las grandes superficies.

Matriz

La empresa es filial al 100% de Frime Holding Company, domiciliada en Arenys de Munt. Los socios principales de esta corporación son sendas entidades tituladas Sociedad Marital SREM y Salramat, propietarias del 49% y el 34%, respectivamente.

Una y otra pertenecen al matrimonio formado por Salvador Ramón Gracia y Encarnación Mateo Soler.

Tres generaciones

Salvador es hijo de Jesús Ramón, el pionero de la saga. En 1937 abrió una modesta parada en el mercado de la Boqueria. Su hijo se incorporó al negocio muy joven, aprendió el oficio y en 1977 fundó Frime.

La tercera generación, encarnada en Salvador Ramón Mateo, ya empuña las riendas de la gestión. Tras casi medio siglo de actividades, Grupo Frime emplea a 415 trabajadores, alberga unos activos de 143 millones y un patrimonio de 18 millones.