La racanería de Majestic y Cuatrecasas revientan el acuerdo hotelero con Messi

Lo detallan fuentes del sector a Crónica Global, precisando que la hotelera catalana ha sido "desleal" con los intereses empresariales del futbolista, con quien se asoció para lanzar la cadena MIM por medio de su socimi Edificio Rostower. 

La joint venture ha sido un éxito rotundo, pues ha firmado seis activos en solo ocho años en Andorra, Baqueira, Sotogrande, Sitges, Ibiza y Mallorca. Pero Majestic quería mantenerlo en mínimos, y cuando no pudo hacerlo, filtró el cisma a la prensa. 

Todo a variable

Preguntada por Crónica Global, la firma de los Soldevila ha declinado hacer comentarios. Y MiM también ha preferido no valorar el desacuerdo. Otras fuentes del sector han señalado que la entente se ha roto porque Majestic se negó a asegurar un fee mensual fijo como arrendataria. 

"Los Soldevila querían un acuerdo 100% variable, sin fijos. No podían asumir nada más, pese a que el proyecto ha sido un éxito. Para forzarlo, acudieron a Cuatrecasas buscando apoyo, siendo desleales com MiM", señalan.

La intervención del bufete barcelonés sentó mal --las dos partes acumulan ocho años de estrecha colaboración, un vínculo que no precisaba de letrados-- y fue en balde. No aseguró ningún pacto, sino que complicó aún más la situación. 

Filtra a la prensa

Cuando quedó claro que MiM precisaba de algo más de solidez, desde la propia Majestic se filtró el desacuerdo a los medios de comunicación para moldear el relato. 

"Fue el propio Malco Par, director general de Majestic Hotel Group, quien llamó a la prensa. Se buscó formar la idea que es la hotelera quien deja MiM, cuando es al revés". 

En efecto, la noticia deslizada a Europa Press presenta un supuesto divorcio por el modelo de Majestic, que es de "gestión", frente al de MiM, que sería de "arrendamiento". Desde el sector insisten en que ese relato es "un pretexto", y que ha sido la hotelera catalana la que ha perdido a la prestigiosa marca por "su racanería" con el pago mensual. 

Gestión

Ha sido la enseña barcelonesa la que no quiso entrar en un acuerdo top-bottom, por el cual se asegura un mínimo mensual al propietario. "No tenía capacidad, o no quería hacerlo, o las dos cosas", insisten las mismas voces. 

En paralelo a ello, Majestic ha hecho una ejecución polémica del acuerdo. Aunque beneficioso y rentable en general, la compañía catalana ha cerrado episodios concretos controvertidos, como la apertura de una central de compras en Mallorca que pocos en el sector entienden. 

Estos deslices se atribuyen a la figura de Gemma Ravasi, directora de Operaciones de Majestic y directora general de MiM. Ha sido esta directiva de la casa la que ha generado estas fricciones en una aventura empresarial "muy rentable y exitosa". 

El futuro de MiM

Sea como fuere, la ruptura con Majestic deja libre a MiM para buscar a un nuevo socio. La firma explorará un nuevo acuerdo con una cadena internacional para seguir con su expansión. 

No en vano, la marca estrenó el MiM Sotogrande el verano pasado. El estreno del alojamiento de cinco estrellas y 45 habitaciones corrobora que la aventura turística marcha a toda vela. Solo necesita otro gestor para continuar. 

Dividendo

¿Y Majestic? La hotelera familiar de los Soldevila Casals --la controlan los siete hermanos de la familia, que también copan el consejo de administración-- cerró un buen ejercicio 2023, el último presentado en el Registro Mercantil. Facturó 54 millones y ganó 12,6, un 80% más que el ejercicio precedente. 

El buen ejercicio permitió a la firma repartir un dividendo de 9,4 millones, que se ingresó íntegramente a la saga propietaria.