Melissa, fundadora de Clínica Akiabara

Melissa, fundadora de Clínica Akiabara GALA ESPÍN Barcelona

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Clínica Akiabara: dos emprendedoras catalanas transforman una estafa en su renacer

Engañadas en pleno crecimiento, resistieron la quiebra y lograron reabrir en el corazón del Eixample

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En 2018, en Sant Cugat del Vallès (Barcelona), nacía Akiabara. No era una clínica de estética más, sino el resultado de un sueño incubado durante años en la mente de Melissa, entonces una joven ingeniera de diseño industrial de 25 años.

Su interés por la belleza y el mundo de la estética había surgido casi por casualidad, en el trabajo de final de carrera, cuando empezó a investigar sobre aparatología, maquinaria y técnicas que, aunque no dominaba, despertaron en ella una pasión inesperada.

“Aquí podía aunar el diseño industrial con la estética y aportar algo distinto: autoestima y seguridad a los clientes”, recuerda.

De idea a realidad

El proyecto empezó a tomar forma cuando encontró a Cristina, una esteticista de 43 años con experiencia y oficio. El encaje fue inmediato. Melissa aportaba la innovación y la visión técnica; Cristina, el conocimiento práctico y el trato cercano.

Equipo completo de Clínica Akiabara

Equipo completo de Clínica Akiabara GALA ESPÍN Barcelona

Juntas supieron que no querían conformarse con un simple centro de estética: su ambición era abrir directamente una clínica. Buscaron doctora, tramitaron licencias y en enero de 2018 levantaron la persiana de Akiabara.

Un método propio

Su propuesta se basaba en un método propio, el Glow Up Project, que consiste en diseñar tratamientos personalizados para cada cliente en lugar de ofrecer un catálogo cerrado de servicios. Sobrevivieron a la pandemia y, con el auge de las redes sociales y la cultura del bienestar, el centro creció a un ritmo acelerado.

Pero a mediados de 2023, Sant Cugat se quedó pequeño y el mercado más dinámico estaba en Barcelona. La decisión era clara: había que dar el salto a la capital.

Interior de la clínica Akiabara

Interior de la clínica Akiabara GALA ESPÍN Barcelona

La estafa

Encontraron el local perfecto en la calle Aribau 120, en pleno Eixample. Sin embargo, lo que debía ser un paso adelante se convirtió en la mayor pesadilla de su historia.

Las obras quedaron a medio hacer, los operarios desaparecieron y parte de la nueva maquinaria fue sustraída. Para entonces ya habían cerrado la clínica de Sant Cugat, vendiendo la aparatología antigua, lo que las dejó con un centro inacabado y la persiana bajada durante ocho largos meses. “Desaparecimos del mapa”, reconocen, todavía con la voz entrecortada.

Melissa (izquierda) y Cristina (derecha) durante la entrevista con Crónica Global

Melissa (izquierda) y Cristina (derecha) durante la entrevista con Crónica Global GALA ESPÍN Barcelona

Pocos querían hacerse cargo de una reforma empezada por otros. Los presupuestos se disparaban, las deudas también. Pero no se rindieron. Perdieron buena parte de los ahorros acumulados en cinco años de esfuerzo, aunque finalmente lograron reabrir en febrero de 2024.

Hoy, desde el corazón de Barcelona, Akiabara representa mucho más que una clínica de estética: es la prueba de que los tropiezos no tienen por qué marcar el final, sino el inicio de un nuevo capítulo.

'Chef' de belleza

Más allá de los golpes sufridos en el camino, Melissa y Cristina defienden una manera muy concreta de entender la estética. Su filosofía se basa en la personalización absoluta. “Igual que un chef selecciona ingredientes de calidad para crear la receta perfecta, nosotros diseñamos el tratamiento ideal para cada persona”, explican.

Interior de la Clínica Akiabara

Interior de la Clínica Akiabara GALA ESPÍN Barcelona

Ese es su sello: combinar técnicas, productos y tecnologías para potenciar resultados sin encasillarse en un único servicio. Akiabara rechaza el consumo impulsivo de tratamientos solo porque se han puesto de moda en redes sociales.

“Lo que funciona a una persona no siempre funciona para otra. Nuestro trabajo es evaluar, diagnosticar y proponer lo que realmente necesita cada cliente”, remarcan.