
Tatxo Benet, CEO de Mediapro, en una imagen de archivo
Tatxo Benet, cuestionado tras perder al principal socio de Mediapro
Al grupo se le escapa la producción audiovisual del fútbol español y agrava las dudas del fondo Southwind Media sobre el empresario catalán
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Tatxo Benet, cuestionado al frente de Grupo Mediapro. El portazo de LaLiga al conglomerado audiovisual catalán para la producción audiovisual de la Primera y Segunda División de las próximas cinco temporadas ahonda en las dudas sobre la gestión del presidente y CEO de la firma catalana.
El empresario, que recientemente ha incorporado como asesor al también exfundador de la compañía Gerard Romy, se enfrenta a dudas sobre su trabajo. Y son reservas que proceden del accionista mayoritario, Southwind Media.
Lo detallan fuentes conocedoras de los entresijos internos de Mediapro, que alertan de que el hecho de que LaLiga haya elegido a HBS y Telefónica Servicios Audiovisuales (TSA) para la producción del primer y segundo nivel del fútbol español “supone una pérdida de negocio y presencia” para la compañía catalana.
Aunque LaLiga no ha detallado el importe del contrato, la prestación de servicios de producción generó a Mediapro el 20% de su cifra de negocio, que en 2023 ascendió a 1.204 millones.
En sus estados financieros, la firma presumía de la importancia de los derechos deportivos, principalmente el contrato que mantenía con LaLiga, como símbolo de robustez económica. De hecho, la consultora Moody remarcaba la dependencia que tenía el grupo del contrato de explotación de LaLiga.
“Reservas en Southwind”
Las fuentes consultadas indican que el golpe para Mediapro llega después de que Javier Tebas, presidente de LaLiga, “llevara tiempo barruntando la mejor manera de cambiar de proveedor” de la producción audiovisual.
Finalmente, Tebas ha hallado la fórmula, que divide en cinco bloques –HBS— más uno –TSA-, y un sexto que queda desierto. La decisión se ha vivido de forma “dramática” internamente en Mediapro, toda vez que los derechos audiovisuales “aportaban una parte muy importante de la facturación anual” de la empresa.
Estupor y nervios en Mediapro
Por su parte, el grupo audiovisual avanzó ayer que estudiaba “impugnar” la decisión por “falta de transparencia”. Asimismo, afeó a LaLiga “exagerar las virtudes” de los dos adjudicatarios. En puridad, Mediapro envió ayer dos comunicados: el segundo suavizó las contundentes expresiones del primero.
Esto, indican las voces consultadas, son síntomas de “nervios” en avenida Diagonal 177, sede de Mediapro en Barcelona. “Southwind ya se deshizo de Jaume Roures –ex socio gestor— en octubre de 2023, y ahora no le temblará el pulso en hacer lo mismo con el actual consejero delegado”, han señalado.
Primer mazazo después de la etapa Roures
Se da la circunstancia de que el mazazo a Mediapro llega un año después de la salida de Jaume Roures del grupo que él mismo fundó hace 30 años. El empresario fue despedido a finales de 2023, después de que el accionista mayoritario Southwind forzara su salida.
Roures sí supo cómo negociar con Javier Tebas, con quien mantenía una estrecha relación personal. Ambos compartían el objetivo de revalorizar los derechos de la competición; e incluso llegaron a crear sociedades conjuntas para explotar activos comerciales en otros países.
Sin embargo, no podían estar más alejados ideológicamente. Roures es reconocido marxista y culé, y Tebas, madridista confeso y mucho más escorado a la derecha ideológicamente. Ahora, desde Mediapro barajan la posibilidad de que la salida de Roures haya podido influir en el carpetazo de Tebas.
Quien sí ha sido un gran crítico con la gestión de Mediapro y la producción audiovisual de LaLiga es el Real Madrid. El equipo blanco ha arremetido en los últimos meses con las retransmisiones que se hacían de los partidos, sobre todo con las repeticiones de las jugadas.