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Cada vez es más habitual encontrar deportistas profesionales, especialmente en el mundo del fútbol, que invierten en el sector inmobiliario para dar rendimiento al dinero obtenido en sus contratos millonarios. Con ese propósito, Enric Franquesa, actual jugador del Leganés de Primera División y canterano del Barça, ha creado la sociedad Motoreto Franki

Imagen de archivo de Enric Franquesa con la camiseta del Leganés CD Leganés

Con sede en Sant Cugat del Vallès, la ciudad natal de Franquesa, dicha firma nace con el objetivo de administrar inmuebles, gestionar alquileres y realizar operaciones de compraventa.



De hecho, la sociedad del jugador comparte domicilio con alguna de las empresas de su padre. En la Comunidad de Madrid, según portales especializados, el futbolista tiene un sueldo anual de 480.000 euros. 

1,7 millones de euros por una trayectoria en múltiples equipos

Desde 2017 hasta la actualidad, Enric Franquesa habría ganado, aproximadamente, 1,7 millones de euros tras formar parte de las plantillas del Barça B, Sabadell, Gavà, Mirandés, Girona, Villarreal, Villarreal B, Levante y el citado Leganés. 

Más allá de su trayectoria en los terrenos de juego, Enric Franquesa es hijo de Joan Franquesa, directivo del FC Barcelona durante la primera etapa de Joan Laporta en la presidencia de la entidad azulgrana.

Imagen de archivo de Joan Franquesa, exdirectivo del FC Barcelona Cámara de Terrassa

En noviembre de 2009, Franquesa padre presentó su dimisión como vicepresidente de Relaciones Institucionales y Patrimonio por razones personales. En el entorno del club se interpretó dicho movimiento como una protesta por el hecho de que el hasta entonces directivo formaba parte de una lista de personas espiadas por el mismo Barça. 

Liderazgo en Sant Cugat Empresarial y la Cámara de Terrassa

Tras esta aventura, Joan Franquesa se refugió en el sector privado como experto en derecho urbanístico y gestión patrimonial. En clave institucional, Franquesa ha ocupado la presidencia de Sant Cugat Empresarial (2015-2021) y actualmente es delegado de la Cámara de Comercio de Terrassa en Sant Cugat, Rubí y Castellbisbal. 

Pese a estar apartado de la actualidad futbolística, Franquesa volvió a la primera línea mediática por unas declaraciones sobre el denominado caso Negreira, donde se acusó al Barça de abonar dinero a un dirigente arbitral.

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