El pleito de Grifols contra Gotham sube de temperatura y añade incertidumbre sobre la empresa

La actividad en torno a la demanda presentada hace casi un año por Grifols contra Gotham City en un tribunal de Nueva York está siendo muy intensa en las últimas horas. El magistrado Lewis J. Liman, que se ocupa de la causa, ha recibido una nueva petición de archivo de la misma por parte de los representantes legales del fondo especulador; no se ha hecho esperar la respuesta de la compañía española, con la solicitud de que no se atienda la demanda de Gotham. 

Un cruce de misivas que sigue a la fijación de nuevas fechas clave para que ambas partes defiendan sus posiciones, como informó Crónica Global. Tras las alegaciones expuestas el pasado 20 de diciembre, el juez ha concedido algo más de tiempo a los Grífols para armar su defensa.

Junta de accionistas de Grifols el 14 de junio en Sant Cugat del Vallès, Barcelona Cedida

Sin embargo, a la vista de los últimos movimientos de Gotham, todo parece indicar que la estrategia del fondo consiste en hacer que los abogados de Grifols no estén centrados en preparar su defensa. La defensa del fondo y de sus fundadores y principales ejecutivos, Daniel Yu y Cyrus de Weck, no han puesto las cosas fáciles desde el inicio del proceso, tanto a la familia Grífols como al propio magistrado.

El productor de hemoderivados presentó la demanda el 24 de enero de 2024, apenas dos semanas después de que Gotham City publicara un primer informe sobre la situación de la compañía, que provocó un espectacular desplome de las acciones. La reacción del mercado, la inmediata actuación de los fondos especuladores y la incertidumbre que generó abrió una crisis que Grifols aún no ha logrado superar. 

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La CNMV expedienta a Gotham por manipular el mercado y a Grífols por defectos contables

La compañía acudió a los tribunales con la acusación a Gotham de haber difundido información falsa o inexacta a los mercados con la intención de dañar la cotización de la empresa y obtener beneficio de ello.

Una tesis que no sostiene en exclusiva la empresa afectada. Tras concluir la investigación que llevó a cabo a raíz del hundimiento bursátil de Grífols, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) decidió abrir un expediente sancionador a Gotham al observar indicios de posible manipulación del mercado.

Incertidumbre

Además, trasladó a la Fiscalía los resultados del trabajo de investigación que realizó por si la actuación de Gotham fuera constitutiva de delito; por el momento, la Fiscalía ha iniciado su particular proceso de investigación.

Lo cierto es que el caso está adquiriendo temperatura cuando está a punto de cumplirse un año desde su inicio. Una circunstancia que añade aun más incertidumbre a una compañía que atraviesa en estos momentos una fase delicada después de que se haya esfumado la posibilidad de que Brookfield lanzara una OPA para hacerse con la mayoría del capital junto a la familia fundadora.

La cotización de Grifols durante una sesión de los últimos días / EP

Desde que el fondo canadiense confirmó que abandonaba los planes que puso en marcha a comienzos de julio, cuando trasladó la propuesta a los Grífols, la cotización de la farmacéutica ha vuelto a sucumbir por debajo de la cota de 10 euros, a la espera de acontecimientos que provoquen una reacción firme. 

Ni siquiera una nueva emisión de bonos, que ha hecho posible despejar el panorama de vencimientos de relevancia hasta 2027, ha dado lugar a una reacción de Grifols en bolsa. 

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Grífols sube con fuerza en bolsa tras refinanciar deuda con bonos por 1.300 millones

La tensión en torno al pleito en EEUU no parece tampoco ser lo mejor para la salud de Grifols como empresa cotizada; se trata de un elemento que consume recursos, además de ser un elemento de distracción. Y todo ello con un final más que incierto.

La cotización del productor de hemoderivados aun mantiene un descuento de algo más de un tercio respecto al precio que presentaba en la víspera de la aparición de aquel informe de Gotham. 

Muchos cambios

Desde entonces, muchas cosas han cambiado en el grupo. La deuda se ha refinanciado con nuevas emisiones de bonos y recortado gracias a ventas de activos; los resultados han mostrado avances en el negocio tras el varapalo que supuso la crisis del Covid para las reservas de plasma. 

Mientras, el modelo de gobernanza, que también era muy cuestionado en el informe, ha avanzado hacia uno que pone el foco en la necesaria separación entre la propiedad y la gestión. Aspectos que, por ahora, no han sido suficientes para que Grifols salga de su particular laberinto.