El presidente de la Fundación La Caixa, Isidro Fainé, ha cerrado la XXI edición del congreso de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos, entidad que también preside, en La Coruña. “El intercambio de conocimiento debe ser estimulante en las empresas”, mantiene Fainé.
Los 1.600 directivos y directivas presentes en el recinto de Palexco han recibido la petición, por parte del dirigente bancario, de “buscar las maneras de afrontar los grandes cambios” y, a la vez, "se normalice la convivencia con la complejidad y la incertidumbre".
La recta final del congreso también ha contado con la participación del Rey Felipe VI y el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo. El monarca ha aprovechado el altavoz del encuentro de directivos para hablar de la inteligencia artificial como una “herramienta estratégica”.
Felipe VI pone deberes a los empresarios
En este sentido, Felipe VI ha puesto deberes a los empresarios. “Como líderes de vuestras respectivas empresas, debéis velar por el uso responsable de estas tecnologías y así mantener la confianza de empleados, clientes y proveedores”.
En su turno, el presidente del PP ha defendido una política económica “orientada a la creación de empresas”. Feijoó se pone como reto que el 20% del PIB español sea vinculado a las actividades de alto contenido tecnológico y, a la vez, ha pedido a las empresas “incentivos para promover la natalidad”.
Respecto de la relación entre empresarios, el expresidente de la Xunta de Galicia quiere “evitar cualquier enfrentamiento”. En el tramo final de la jornada empresarial, el protagonismo también ha sido para los presidentes de Telefónica y Naturgy.
José María Álvarez-Pallete ha ofrecido su punto de vista sobre el papel de los directivos en la gestión de la inteligencia artificial. “La IA y la tecnología que la acompaña conlleva un incremento de un 30% del tráfico de datos, hecho que nos ha obligado a cambiar nuestras redes”, puntualiza Álvarez-Pallete.
Pallete (Telefónica): "Europa ha perdido el tren de la innovación"
Ahora bien, más allá del caso de Telefónica, el ejecutivo lamenta que Europa ha perdido “el tren de la innovación”. Incidiendo más en la operativa diaria de las empresas, Francisco Reynés cree que la inteligencia artificial “permite gestionar muchos datos para tomar decisiones inmediatas”.
“Un país que no compute será menos competitivo”, así de contundente se ha pronunciado Mateo Valero. Lejos de situar el beneficio del Barcelona Supercomputing Center en un determinado sector económico, Valero ofrece las instalaciones que dirige para proyectos de “precisión”.
Sobre los límites éticos de una tecnología como la IA, la directora de Transformación Digital de Caixabank, Mariona Vicens, ha puesto encima de la mesa la necesidad de impulsar “marcos de privacidad muy exigentes” en las empresas, así como educación y formación. Según datos de Microsoft, los desarrolladores de software de la multinacional han incrementado un 50% su rendimiento por el uso de las nuevas tecnologías.
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