Tropiezo de Praktik Hotels y Batlle i Roig con su gran proyecto de centro cultural en la Rambla de Barcelona.
La hotelera de la familia Trénor y el estudio de arquitectura han visto cómo la transformación del Teatro Principal, de 25 millones de euros, topa con dificultades estructurales y con la reforma de la Rambla. En síntesis: la obra se complica y se demora a 2027.
Lo detallan fuentes del sector arquitectónico a Crónica Global, alertando de que la gran reapertura del coso más antiguo de la capital catalana, abierto en 1596, no será tal. Al menos por ahora. Es así porque la gran reconversión ha topado con un "muro flotante" que hay que consolidar, y porque los trabajos de gran envergadura no pueden finalizar antes de que termine la puesta a punto de la Rambla, prevista para 2027.
"Problemas arquitectónicos"
Este medio ha preguntado a las dos partes sobre el proyecto. Praktik ha declinado hacer comentarios. Batlle i Roig se ha ceñido a los acuerdos de confidencialidad. Sí han respondido otras fuentes del sector, que han alertado de que la inversión "se ha topado con un muro flotante que divide el Teatro Principal con el frontón Jai-Alai, la construcción anexa", según han descrito.
Ello ha provocado que la obra, que capitanea la firma de ingeniería Avintia, "se retrase, pues una actuación a gran escala puede provocar que se derrumbe la parte colindante".
Subordinado a la reforma de la Rambla
Hay más problemas. Las fuentes consultadas indican que la constructora no puede comenzar los grandes trabajos -el desescombro sí se ha iniciado- hasta que termine la gran puesta a punto de la Rambla. La obra pública, de 55 millones, se ejecuta en tres fases: por carriles, primero, y en el paseo central, después.
Por ello, Inversiones Hoteleras Atir, la empresa de Praktik, tendrá que aguardar pacientemente hasta que reabra el bulevar más conocido de Barcelona. "Lo contrario sería una locura: bloquear un paseo en obras con máquinas y contenedores privados. Les han exigido que esperen".
Un hotel escondido (que no se ejecutará)
Por el momento, el proyecto tiene licencia de obras, pero no la puede poner en marcha. Al menos de forma integral hasta sortear los obstáculos citados.
Lo factual y que no se hará es acometer un proyecto anterior de hotel que está visado y aprobado por Urbanismo del Ayuntamiento de Barcelona: un hotel.
Como avanzó este medio, el edificio de artes visuales de Praktik en la Rambla nace con sospechas desde su génesis, pues hay desconfianza de que se relaje la restrictiva normativa hotelera y la cadena rescate un plan urbanístico anterior que contempla un hotel en la Pensión España, que da a la parte de atrás de la Rambla.
Todas las partes, ayuntamiento y hotelera, aseguran que eso es imposible. Aunque parte del sector desconfía: "Es lo que Praktik sabe hacer".
Negociación con Balañá
Haya hotel o no, lo cierto es que los Trénor consiguieron que la familia Balañá, dueños del teatro de espectáculos y piezas anexas, les cedieran el activo. Fue, indican las fuentes consultadas, una "negociación dura", pues los herederos de Pedro Balañá, el que fuera mago del espectáculo de la Ciudad Condal, no se fiaban de los negocios propuestos.
Eso sí, hubo quien alertó de que el anterior gobierno municipal de Barcelona, que dirigía Ada Colau, permutó a Praktik la apertura de un hotel en el Teatro Principal al frustrar su doble inversión en un solar de la avenida Drassanes. La iniciativa de la cadena familiar fue vetada por los comunes. El solar, finalmente, será una residencia de estudiantes, explicó Metrópoli.
Punta de lanza
Teorías aparte, el factum es que el proyecto estrella de Praktik en Barcelona avanza con retraso. Prueba de ello es que el gestor familiar de la hotelera, José María Trénor Lowenstein, creó la sociedad que gestionará y construirá el centro el pasado 18 de octubre. Fue exactamente diez meses después de la fecha en la que, en teoría, tenía que subir el telón, según anunciaron todas las partes y el propio ayuntamiento en diciembre de 2021.
Y eso que el nuevo Principal está llamado a ser la punta de lanza del relanzamiento de la parte baja de la Rambla, la parte menos noble y más conflictiva de la avenida, por la que suben y bajan diariamente unas 200.000 personas.
En este mejorable enclave también se enmarca el nuevo centro cultural que abrirá en la antigua Casa Joan, como avanzó este medio. Lo impulsa la familia Gavarró, fundadores de Proteinsa, grupo líder en fabricación de proteínas de cólageno de Girona que se vendió a Italgel en febrero de este mismo año. Y, también, el proyecto de la Generalitat de Cataluña de un centro de arte digital en la Antiga Foneria de Canons, junto al Gobierno Militar, cuya rehabilitación ya ha empezado.