Más leña al fuego de la demanda que Grífols presentó en EEUU contra Gotham City Research y sus principales responsables. La compañía ha ampliado la denuncia con nuevos documentos que incluyen las conclusiones de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) sobre sus prácticas contables y ejemplos del daño reputacional causado por la publicación del informe del fondo bajista a comienzos de año, que hundió la cotización de la farmacéutica.
La actualización del pleito presentado en el Tribunal del Distrito de Nueva York, en el que Grífols acusa a Gotham de difundir información falsa sobre la empresa para su beneficio, ha dado alas al productor de hemoderivados en bolsa. Camino de la media sesión, sus títulos acumulan alzas que superan el 4%.
La cotización de la empresa se había estancado en los últimos días debido a la incertidumbre generada por los rumores sobre los detalles de la potencial OPA que negocian la familia fundador y primer accionista junto al fondo Brookfield.
La ampliación de la denuncia pivota sobre el informe de conclusiones que elaboró en su día la CNMV tras solicitar información adicional a Grífols sobre sus cuentas, a raíz de la crisis generada por la publicación del documento de Gotham, que ponía en duda las prácticas contables de la compañía.
Prestamista a la fuga
El supervisor del mercado español no determinó que la farmacéutica debiera reformular sus estados financieros, al no detectar errores graves, aunque sí observó algunos defectos, que llevaron a Grífols a reexpresar determinadas partidas relacionadas con la deuda, que hizo aflorar algo más de 1.000 millones de euros.
Además, la compañía cotizada asegura que la situación generada por el informe de Gotham hizo que "una empresa en la que Grifols es un importante inversor y de la que controla múltiples puestos en su consejo de administración vio cómo su prestamista de toda la vida se negaba a renovar la financiación debido a la percepción de un riesgo crediticio".
Ese riesgo estaba relacionado con las informaciones publicadas a raíz de la aparición del informe, que generó un contexto en el que el prestamista no quería aparecer bajo ningún concepto.