La alianza automovilística formada por la marca china Chery y la española Ebro-EV Motors iniciará a mediados de noviembre la producción de vehículos en la antigua fábrica de Nissan en la Zona Franca de Barcelona con los SUV -todoterreno- de la marca Ebro, mientras que el modelo que debía reactivar la producción, el Omoda 5, se montará finalmente a partir de septiembre u octubre de 2025.
Así lo explica un comunicado remitido por los sindicatos a la plantilla tras la reunión mantenida este lunes entre representantes sindicales y la dirección de Ebro Factory.
El Omoda se demora
Según el la lista, la alianza formada entre Chery y Ebro-EV Motors arrancará la producción con la marca Ebro en lugar de con Omoda.
En concreto, está previsto que el Ebro S700 empiece a producirse el 18 de noviembre, que el Ebro S800 lo haga el 28 de noviembre y que un nuevo modelo de Ebro, el S400, se empiece a producir en junio de 2025.
Cambio de estrategia por los aranceles
Los sindicatos han explicado a la plantilla que "los cambios en la legislación sobre aranceles de vehículos fabricados en China han modificado la estrategia de producción del Omoda 5 en Barcelona".
La marca china está "tramitando la homologación de Omoda como fabricante europeo, por lo que la producción de Omoda pasará directamente al formato CKD (Complete Knock Down), prevista para septiembre-octubre de 2025, con 5.000 unidades eléctricas como fabricante europeo", asegura el comunicado.
En un principio, el Omoda 5 -que se vende en España desde este año- debía empezar a ensamblarse en la planta de Barcelona en el tercer trimestre de este año con piezas traídas en barco desde China, pero finalmente se pasará directamente a la producción estándar, por lo que hará falta soldar y pintar el vehículo que salga por la línea.
Ebro producirá ya este noviembre
Según los sindicatos, el adelanto de la producción del Ebro S400 y las buenas expectativas de venta de los modelos S700 y S800, permitirían absorber los volúmenes previstos del Omoda 5.
A mediados de abril, el grupo automovilístico chino Chery y la empresa española Ebro-EV Motors anunciaron que prevían producir 50.000 vehículos en 2027 y 150.000 en 2029 en las antiguas instalaciones de Nissan en la Zona Franca de Barcelona y generar unos 1.250 empleos, con una inversión público-privada de 400 millones de euros.