Pese al incremento generalizado de los tipos de interés y la debilidad de los países de la eurozona, Caixabank ha publicado, recientemente, un informe donde habla de una economía con buenas perspectivas de crecimiento. ¿La razón? La evolución del mercado laboral y los datos del turismo internacional. Un elemento a tener en cuenta para contextualizar el impacto del turismo en España es que, durante el primer trimestre del año, el crecimiento se situó solamente por debajo de las estadísticas del 2019.
Para valorar la actividad turística nacional, en comparación con el negocio del entorno del sur de Europa, el Foro Económico Mundial felicita a España por su esfuerzo en materia de sostenibilidad. Eso sí, no todo son cumplidos, el organismo insta a reducir una “elevada” estacionalidad y la concentración geográfica de la oferta turística.
El centro de estudios de Caixabank no atribuye el triunfalismo español a una sola variable, pero engloba el crecimiento, a grandes rasgos, al papel del turista norteamericano. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), Estados Unidos es el primer mercado no europeo para España. Cataluña es la comunidad con mayor recepción de visitantes del otro lado del charco y concentra el 38% del gasto nacional.
Interés por el ocio, la cultura y la arquitectura
En Barcelona, los yanquis lideran la clasificación de gastos en transporte y alojamiento (1.778 euros por persona). El ocio, la cultura y la arquitectura son algunas de las razones por las cuales más del 75% de los visitantes norteamericanos llegan a la capital catalana, con una estancia media de cinco noches. En el ámbito comercial y de la restauración, el sector local valora la presencia americana por el hecho de llevar a cabo un gasto más repartido.
Pese al debate sobre el impacto en el medio ambiente, Barcelona ama al crucerista de Estados Unidos por ser uno de los grandes clientes y, a la vez, salvar las cuentas de resultados de muchos negocios fuera de la temporada estival. El 2023 llegó a su fin con el récord de ser el año con más cruceristas en la ciudad. Concretamente bajaron las escaleras 3.138.174 turistas.
Los norteamericanos proceden, principalmente, de California, Nueva York y Florida. Un hecho que se debe vincular a las conexiones aéreas con estos territorios desde el aeropuerto de El Prat. Texas, Massachusetts o Carolina del Norte son algunos de los estados con un peso secundario, pero no menos relevante. La Generalitat calcula que el mercado norteamericano deja un gasto aproximado de 2.500 millones de euros en Barcelona y el resto de Cataluña.
El efecto de la Copa América y los mercados emergentes
La celebración de la Copa América de vela, entre el 22 de agosto y el 20 de octubre, será el gran evento del verano y seguramente del año en Barcelona. Más allá del ámbito deportivo, la competición es un gran caramelo por el impacto económico que deja en la ciudad. Un estudio de la organización, realizado con la colaboración de la Universitat Pompeu Fabra, apunta que el espectáculo marítimo atraerá 2,5 millones de visitantes. Una gran porción de este pastel serán norteamericanos.
De los 1.115 millones de euros previstos como impacto económico, 689 millones corresponden al gasto en la ciudad. Tampoco hay que olvidar que Barcelona genera una gran cantidad de negocio con el turismo de negocios americano. Un perfil de trabajador que acostumbra a dormir en hoteles de alta categoría.
Imagen de un velero de la Copa América de Vela
Limitando con Estados Unidos aparece otro mercado emergente para Barcelona y toda Cataluña. A finales del año pasado, por primera vez, la Generalitat organizó una reunión comercial con 20 operadores turísticos de México. Actualmente, el 19% de los turistas mexicanos escogen Cataluña durante su visita a España. El último dato disponible certifica un gasto global de 251 millones de euros. Se trata de personas que acostumbran a viajar en familia, no quieren seguir los circuitos convencionales y reparten su descanso por todos los meses del año.