CaixaBank ha cerrado este lunes una emisión de deuda que se ajusta a los criterios ESG (sostenibles, medioambientales y de gobierno corporativo), también denominados bonos verdes, la séptima de este tipo lanzada por el banco, por un importe de 1.250 millones de euros.
Fuentes de CaixaBank han precisado que la emisión ha generado una demanda superior a los 4.250 millones de euros y que se ha hecho en formato senior no preferente y con un vencimiento a ocho años, aunque tiene opción de amortización anticipada en el séptimo. Según han especificado estas fuentes, el tipo de interés final ha sido de 150 puntos básicos sobre midswap, 35 puntos básicos menos de los ofrecidos en el anuncio.
Renovables y transporte
Las entidades encargadas de la colocación han sido CaixaBank, Citi, Goldman Sachs Bank Europe, HSBC y Natixis. Los fondos captados por esta emisión se destinarán a financiar proyectos de energía renovable, edificios energéticamente eficientes, transporte público limpio, proyectos de agua y consumo responsable.
Se trata de la segunda emisión de bonos en formato público de CaixaBank en lo que va de año y la primera en formato verde senior no preferente. Asimismo, es el séptimo bono verde que emite este banco (el sexto en euros) desde noviembre de 2020, cuando estrenó este formato de deuda.