Escribano se ha situado como segundo accionista de Indra tras incrementar su participación hasta alcanzar el 8% de la compañía participada por el Estado. La empresa de innovación y tecnología de Defensa se ha hecho en las últimas semanas con un 4,6% adicional de Indra, valorado a precios de mercado en algo más de 66 millones de euros.
Este paquete de títulos se une al 3,4% que Escribano adquirió el pasado mayo, cuando afloró como accionista significativo de la empresa participada por el Estado, precisamente el primer accionista con un 28% del capital.
Inversión estratégica
En un comunicado en el que da cuenta de la operación, Escribano recuerda que ya mostró su intención de elevar su presencia en la compañía y define la inversión como "estratégica, con la finalidad de consolidar su posición empresarial".
De esta forma, Escribano pasa a ser el primer socio industrial de Indra, por encima del grupo vasco Sapa, que cuenta con un 5%.
La irrupción de Amber
Poco antes del verano de 2022 también irrumpió en el capital de Indra el fondo Amber, primer accionista de Prisa, con la compra de algo más de un 4%, que después amplió hasta el 6,2% que posee en la actualidad. La entidad controlada por Joseph Oughourlian tiene además la autorización del Consejo de Ministros para llegar hasta el 9,99% de Indra.
Tanto Sapa como Amber cuentan con un puesto en el consejo de administración de Indra.
Máximos de diez años
La compañía presidida por Marc Murtra es una de las más destacadas en bolsa de 2023, como prueba el hecho de que es una de las cinco más revalorizadas del Ibex 35 desde enero, con avances superiores al 35%. Actualmente, cotiza en zona de máximos de los últimos diez años.
Indra ultima los detalles de su nuevo plan estratégico, en el que trabaja el consejero delegado, José Vicente de los Mozos, desde su llegada a la compañía, a mediados de este año. Recientemente, la empresa revisó al alza sus objetivos para el conjunto del año.