Imagen de la sede de Holaluz en Barcelona

Imagen de la sede de Holaluz en Barcelona Cedida

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Holaluz despide a 200 personas mediante un ERE tras sus malos resultados económicos

La compañía comunica a los representantes de los trabajadores la decisión, que afectará a unos 200 trabajadores, y lo justifica con la necesidad de adaptarse a las actuales circunstancias

13 noviembre, 2023 10:56

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La desaceleración en el segmento de autoconsumo residencial ha forzado a Holaluz a iniciar un proceso de ajuste en su plantilla a través de un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectará a unos 200 trabajadores, aproximadamente un 27% del total.

La empresa ya ha comunicado a los representantes de los trabajadores a primera hora de este lunes la decisión, que ha justificado por la necesidad de "seguir con la adaptación de la compañía a las necesidades reales y actuales del mercado", y ha especificado que el recorte de plantilla "afectará principalmente a los equipos de instaladores, ventas y roles de soporte a las operaciones de solar".

Volatilidad de precios

La evolución del mercado solar residencial se ha resentido en los últimos trimestres, lo que se ha reflejado en las cuentas de Holaluz. En concreto, los resultados de la primera mitad de 2023 afloran pérdidas de 20,9 millones de euros, que contrastaron con los beneficios de 5,5 millones registrados en el mismo periodo de 2022.

La combinación de la volatilidad en los precios de la energía y la ralentización del negocio solar está detrás de estos números, que han llevado a la compañía a tomar una decisión que ha lamentado la presidenta ejecutiva y cofundadora de Holaluz, Carlota Pi.

Competencia de petroleras

"Con esta adaptación a la situación temporal del mercado seremos capaces de mantener nuestra posición de fortaleza para que, cuando la coyuntura lo propicie, sigamos liderando la transición hacia un modelo energético 100 % verde", ha señalado en un comunicado oficial de la empresa.

Holaluz también ha hecho hincapié en factores que han jugado en contra del negocio de la compañía como la subida de los tipos de interés y una "falsa sensación de moderación de precios" ocasionada por las subvenciones.

Algo que, junto a la capacidad de petroleras y gasistas de ofrecer energía muy por debajo del precio de mercado en el corto plazo, ha derivado en una ralentización a la hora de tomar decisiones de consumo por parte de los clientes residenciales.