El Govern ha anunciado que sube el precio del agua en alta en Cataluña que distribuye la empresa Ens d’Abastament d’Aigua Ter-Llobregat (ATL), la antigua Aigües Ter Llobregat (ATLL). Es decir, el servicio que cubre desde la captación hasta la distribución en los depósitos de cabecera locales de los que beben 5,5 millones de catalanes. El consejo de administración de esta empresa pública ha propuesto una subida del 33% de sus trabajos que se votará en el consejo de la Red Ter-Llobregat y en el consejo de administración de la Agència Catalana del Agua (ACA) este martes por la tarde.
Salvo sorpresas de última hora, la medida saldrá adelante. Cabe tener en cuenta que son las gestoras de agua locales las que pagan la factura de los servicios a ATL. Esta decisión no implica una subida directa del recibo del agua de los consumidores finales. Serán los ayuntamientos y las compañías los que tienen que cerrar ahora un acuerdo para ver cómo se traslada.
Tarifa congelada desde 2017
La petición concreta de la cúpula de ATL es la de subir hasta los 0,99 euros el precio por metro cúbico de agua que trata y lleva hasta 116 localidades catalanas. El coste actual de su servicio es de 0,74 euros y, una vez se ratifique, el cambio se aplicará a partir del 1 de enero de 2024. La Generalitat ha apuntado que, de forma estimada, esta revisión al alza implicaría que el agua consumida se pagaría un euro mensual más cara.
Imagen de las instalaciones de ATL en Cataluña / ATL
En cuanto a los motivos de la revisión al alza, los responsables de ATL señalan que no les queda otra salida por la presión de la sequía en todo el ciclo del agua y por el incremento de “otros costes clave” que soportan. Básicamente, la subida del precio de la energía, las materias primas que usan para tratar y distribuir el agua (materiales y reactivos) y los costes de personal. Señalan que los costes diarios de la compañía han incrementado el 21% respecto al IPC de 2017, el último año en que se subió la tarifa.
Respecto a la sequía, como los pantanos están en mínimos históricos, se compensa la carencia de recursos hídricos con las desalinizadoras. Estas fábricas de agua potable están a pleno rendimiento y su consumo energético es importante, hecho que impacta en los gastos de la gestora pública para cumplir con su cometido.
ATL distribuye agua a 116 municipios
Cabe recordar que ATL es una empresa pública desde 2019, el año en el que el Govern zanjó la llamada guerra del agua en Cataluña y apeó Acciona de la gestión del servicio en alta del territorio.
Gestiona una red de abastecimiento de agua que da servicio a más del 90% de la población distribuida por 116 municipios. Es la más importante de este perfil en el territorio y trabaja en nueve comarcas situadas en Barcelona y su área de influencia. De hecho, llega hasta La Selva (Girona) y el Solsonès (Lleida).
El Govern promete "el mínimo impacto social"
En la misma línea se ha pronunciado la consellera de la Presidencia, Laura Vilagrà, que ha explicado que el incremento será de un euro por persona al mes, a la espera de que cada ayuntamiento apruebe sus ordenanzas fiscales durante este mes de octubre.
En la rueda de prensa tras el Consell Executiu, ha recordado que "desde 2017 no se incrementaba esta tarifa" y ha culpado a la sequía de este aumento del coste. "No es lo mismo que el agua venga de la lluvia", ha espetado, y ha asegurado que desde el Ejecutivo autonómico acompañarán a los consistorios para que esto tenga "el mínimo impacto social, especialmente para los más vulnerables".