Foment del Treball pone deberes al nuevo Gobierno que salga de las urnas del 23J. La patronal ha presentado un decálogo de medidas prioritarias para la economía española ocho días antes de la investidura del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, y mientras se desarrollan las negociaciones entre los independentistas catalanes y el PSOE para investir a Pedro Sánchez.
Lo hace, además, en un contexto complejo para el crecimiento económico en toda Europa que está diluyendo las perspectivas de recuperación robusta tras la pandemia.
Revertir la fuga de empresas
En primer lugar, la organización empresarial presidida por Josep Sánchez Llibre reclama al nuevo Gobierno que favorezca un clima de estabilidad política para facilitar el retorno de las empresas catalanas que cambiaron su sede en 2017 debido al procés.
Al cierre de 2022, hasta 4.671 sociedades se habían mudado, incluidas 12 grandes cotizadas de las cuales solo Agbar ha recorrido el camino inverso.
Visión pro-empresario
Foment también reclama al futuro Ejecutivo una visión amigable hacia el sector privado. "Estos últimos tiempos hemos visto cómo se producían ataques injustificados a empresarios destacados, ninguneando injustamente las importantes acciones que han hecho en favor de la cohesión social", se lee en el comunicado.
"El Gobierno tiene la responsabilidad de poner en valor la aportación de las empresas, que son las que crean puestos de trabajo y facilitan la justa distribución de la riqueza", añade la patronal.
Fiscalidad y gasto en pensiones
La patronal también exige una fiscalidad competitiva --ha abanderado la lucha contra el impuesto de Patrimonio y contra el gravamen temporal a las grandes fortunas--, el impulso de la Formación Profesional (FP), así como "un gran acuerdo en las Cortes Generales que defina un plan de inversiones en infraestructuras que genere certezas y fije prioridades".
Foment recuerda otras de sus reivindicaciones en política energética, de vivienda --la entidad se ha mostrado muy crítica con las políticas del Gobierno y de la Generalitat en esta maeria-- e industrial.
Pero también llama la atención sobre la sostenibilidad del Estado del Bienestar, en concreto sobre las pensiones: "Es inviable mantener el incremento del gasto en pensiones incrementando constantemente las cotizaciones sociales de las empresas, de las más altas de Europa y que son un verdadero impuesto a la creación y mantenimiento del empleo".