Giro en el mercado inmobiliario: se venden menos casas pero más lujosas

Las inmobiliarias ya empiezan a notar el reinicio del mercado de la vivienda. Todavía no en un ajuste de precios -al menos no con una tendencia bajista clara-, pero sí en una reducción en el número de compraventas, que aún así se ha visto compensada por un aumento en el precio medio de las operaciones.

Joan Lluís Marigot, director de Engel Völkers Costa Brava, señala que el número de transacciones se ha contraído en los últimos meses. "Desde la Pascua hasta ahora, estamos hablando de, tranquilamente, un 20 o 25% menos de clientes", detalla.

Los franceses se activan

"Sobre todo ha bajado el mercado inglés. El alemán ha bajado menos, el francés se mantiene o sube", subraya Marigot. Pero en su conjunto, "están bajando las operaciones de compraventa y hay menos compradores", reconoce el consultor inmobiliario.

Lo atribuye a que la economía se encuentra en "un periodo de stand by" a causa de la guerra y el encarecimiento de las hipotecas. Jordi Tàpies, director de Lucas Fox International Properties en Andorra, coincide en que "en general, desde que subieron los tipos de interés han aflojado un poco" las operaciones.

El lujo aguanta

Tàpies incide en que se ha reducido "sobre todo el tipo de vivienda que necesita más financiación". En cambio, "el alto standing se ha mantenido". El ejecutivo del sector recuerda, eso sí, que "cuando subes el ticket hay menos clientela".

Marigot añade una nota de optimismo para el sector. "La buena noticia es que estamos notando que el importe medio de las ventas ha subido un 20 o un 25%", añade.

Los precios bajarán

La subida de operaciones de lujo compensa, al menos en el caso de esta agencia de la Costa Brava, los ingresos por la venta de inmuebles: "Estamos manteniendo facturaciones grosso modo, ahora bien, la tendencia de todo el año es negativa", reconoce Marigot, que recuerda que 2021 y 2022 fueron ejercicios excepcionalmente positivos.

"Si comparamos, los números parecen malos, pero estamos volviendo a cierta normalidad", indica. Asimismo, el responsable de Engel Völkers hace hincapié en que "no estamos hablando de crisis ni de burbuja inmobiliaria, pero sí que los vendedores deberán empezar a plantearse rebajas de precio".

Marigot asegura que estas rebajas todavía no se están produciendo, pero considera "seguro" que "habrá bajadas de precios en la segunda mano". No así en la obra nueva, ya que en general hay una oferta reducida y todavía más en la Costa Brava, donde hay "poca y complicada por los permisos", de forma que "se aguantan los precios bastante elevados".