Los Grifols, apestados en su barrio: otros diez 'vips' exigen parar sus pisos de lujo

La familia Grifols está generando oposición en el barrio de la zona alta de Barcelona donde nacieron: Sarrià. Una decena de personalidades han salido públicamente a pedir que se pare una promoción inmobiliaria que construye la patrimonial de la saga propietaria del laboratorio de hemoderivados junto a Corp. 

Los famosos posh lo han hecho por medio de vídeos difundidos por la plataforma Salvem Can Raventós, donde exigen detener los trabajos de desbrozado del jardín de esta masía histórica para preservarlo como "refugio climático", el vergel; y como equipamiento, la masía aledaña. Ello, claro, significa frustrar los pisos de lujo que impulsan al alimón Scranton Enterprises, la patrimonial de los Grifols, y la firma del ladrillo. 

Diez 'vips' de la zona alta

¿Quién se ha significado contra los apartamentos de lujo? La directora de cine y presidenta de la Acadèmia del Cinema Català Isona Passola; el actor independentista Joel Joan; la también actriz Maria Molins; el reportero y presentador de TV3 Xesco Reverter y la biòloga Cristina Junyent, entre otros.

Una de las voces más destacadas contra los nuevos apartamentos chic es la del médico, empresario, investigador científico y divulgador Eduard Estivill, el llamado médico del sueño, que exige salvaguardar el edifico histórico de Sarrià y su jardín, como explicó este medio. 

Promoción de lujo en un vergel

El pulso viene a cuenta de la promoción premium que construye la inmobiliaria Corp en el solar de la masía histórica de Can Raventós en la calle Bonaplata de este acomodado barrio. La firma lo hace por encargo de Scranton, una patrimonial participada por directivos de la familia Grifols a título individual. 

Vista de Can Raventós, comprada por Scranton CG

El vehículo inversor compró solar y masía en 2021, y ha delegado la construcción de una promoción de 33 viviendas de alto nivel a Corp. Las obras acaban de empezar. 

Debate

La actuación, no obstante, viene aparejada a la polémica, pues algunos vecinos, agrupados en la plataforma Salvem Can Raventós, denuncian irregularidades en la tramitación del proyecto urbanístico. 

El caso ha recalado en la Oficina Antifraude de Cataluña (OAC), que lo está investigando desde octubre de 2020. En paralelo, la asociación vecinal ha entrado un escrito de petición de medidas cautelares al juzgado para detener los trabajos. Aún no tiene respuesta.