La representación legal de los acreedores que presentaron un plan de reestructuración para Celsa han declarado ante el juzgado de lo Mercantil que entiende de la operación que esta vía es la única alternativa para asegurar la supervivencia de la siderúrgica, cuya situación han calificado de "insostenible".
Durante la jornada de conclusiones del proceso que se ha seguido desde comienzos de la semana pasada en el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Barcelona, la defensa de estas entidades, en su mayoría fondos de inversión, ha llegado a plantear al juez que de su decisión dependerá si la empresa sigue adelante o si hay que asumir "que Celsa acabará en una situación de concurso de acreedores".
Plan "irrealizable"
En su argumentación, el abogado que defiende los intereses de los acreedores ha señalado que el plan de negocio que ha presentado la familia Rubiralta, accionista de la siderúrgica, es "irrealizable" dado que cuenta como piedra angular para la refinanciación con el apoyo comprometido en su día por la SEPI, que incluye una quita que los tenedores de la deuda no van a aceptar.
"Los accionistas dan por hecho que en 2023 se ejecutará la ayuda de la SEPI pero es un extremo que no está en su mano. Los acreedores no lo van a aceptar porque es una propuesta que no respeta el valor de la empresa", ha apuntado.
"No han querido negociar"
En su alegato de conclusiones, la representación legal de los acreedores han cargado contra los autores de los informes presentados en el proceso por Celsa sobre la situación de la compañía, entre otros Lazard, PwC y Grant Thornton, a los que ha acusado de tener un "sesgo claro de falta de objetividad".
Igualmente, ha criticado la actitud de los Rubiralta durante los últimos años, en los que, a su juicio, los accionistas de Celsa "no han querido negociar con nosotros sino que han pretendido imponer unas condiciones, sin apenas margen para el diálogo".
Dudosa estrategia
En este sentido, también ha recordado que "a los acreedores se les ha llamado buitres, fraudulentos, se han iniciado procesos judiciales contra ellos, se ha azuzado a terceras personas que prefiero ni mencionar para que les ataquen"; un circunstancia que ha considerado negativa "cuando al final del día son aquéllos con los que tienes que llegar a un acuerdo".
Los acreedores han recordado también que los accionistas de Celsa "han tenido seis años para revertir la situación sin atender el servicio de la deuda", algo que, a su juicio, no han logrado.
La 'prima verde'
Igualmente, consideran que las estimaciones de futuro que ha presentado la compañía durante este proceso, en las que basa su opinión de que podrá ser viable, peca de optimista dado que concede demasiado peso a la denominada 'prima verde', es decir, los notables avances que ha experimentado Celsa en materia de descarbonización.
"Celsa está bien posicionada en este terreno pero cabe dudar de que esa ventaja competitiva se vaya a mantener durante mucho tiempo", ha señalado la representación de los fondos que pretenden que el juez dé luz verde al plan de reestructuración.
"Todas las acerías en Europa están adaptando sus procesos de producción obligadas por las normativas. El 79% del acero largo que se fabrica en Europa procede ya de hornos eléctricos como los que emplea Celsa", ha apuntado el abogado.