Barcelona se prepara para la demanda de perfiles con competencias digitales
Mobile World Capital reúne a más de 2.000 participantes en la segunda edición del evento Jump2Digital
2 diciembre, 2022 00:00El reciente informe Tech Cities: the global intersection of talent and real estate, elaborado por la consultora inmobiliaria Cushman & Wakefield, ha concluido que Barcelona es el hub global de EMEA (Europa, Medio Oriente y África) que más inversión extranjera ha logrado atraer, incrementando la inversión hasta en un 269% durante el período 2018-21 respecto a los cuatro años anteriores y consolidando 41.000 puestos de trabajo relacionados con el sector tecnológico.
Es, además, “una de las capitales con más iniciativa de Europa” en este aspecto, en palabras de Jordi Arrufí, director del programa de talento digital de Mobile World Capital, a Crónica Global. Según él, cada vez son más las empresas catalanas que van a querer incorporar programadores, analistas de datos, especialistas en ciberseguridad, diseñadores de experiencia de usuario o desarrolladores de aplicaciones móviles a sus procesos de transformación digital.
Para abordar todas estas cuestiones, la entidad barcelonesa reunió el pasado viernes a más de 2.000 asistentes en la segunda edición del encuentro Jump2Digital, celebrada en la Llotja de Mar de Barcelona. La jornada contó con la participación de expertos y creadores de multitud de sectores que compartieron sus puntos de vista en lo que se refiere a la creciente demanda de estos perfiles digitales en los próximos años.
Salto entre sectores
Acontecimientos como este ponen sobre la mesa el cambio de paradigma en el mundo laboral, y es que “hasta ahora estábamos acostumbrados a un patrón en el que alguien estudiaba algo y después centraba el resto de su carrera en ese ámbito profesional”, afirma Arrufí. El mercado laboral de hoy existe en un mundo “mucho más líquido” y requiere de perfiles más flexibles capaces de adaptarse a los cambios constantes.
Es por ello que muchas personas se ven obligadas a probar suerte en un nuevo sector o a formarse para conseguir entrar en este nuevo ecosistema de trabajos digitales cursando formaciones intensivas como los bootcamps, que permiten alcanzar en tres meses unos conocimientos básicos en áreas como la programación o el análisis de datos. Cada año, miles de personas se lanzan a cursar este tipo de estudios, cuyos itinerarios “generan un 80% de empleabilidad para aquellos que los realizan”.
Quedarse atrás
Pero para muchas personas esta transición no es un proceso sencillo. Marc Cabezas, propietario de producto en CaixaBank Tech, cree que aquellas empresas no tecnológicas que exijan a sus trabajadores asumir este tipo de nuevas competencias deben no solo crear un ambiente “tecnológicamente inclusivo” en su conjunto de aplicaciones web y herramientas, sino que además tienen la responsabilidad de ofrecer formación para no dejar a nadie atrás.
Sin embargo, y aunque este tipo de problemas se vaya a ir reduciendo en el tiempo debido a que los jóvenes de hoy son ya nativos digitales, Cabezas ha declarado para este medio que la tecnología avanza muy rápido y que, inevitablemente, “siempre habrá una brecha entre las personas que ya no pueden seguir el ritmo y las que sí”.
El acecho de las inteligencias artificiales
Durante el evento Jump2Digital también hubo espacio para dar respuesta a la intranquilidad que genera la evolución de tecnologías como las inteligencias artificiales (IA). El informe del Foro Económico Mundial The Future of Jobs 2020 estimó que para el año 2025 la evolución en este campo habría hecho desaparecer 85 millones de empleos. La misma publicación, sin embargo, también indicó que el número de puestos de trabajo que la IA crearía sería mayor, elevándose a 97 millones.
La clave en esta ecuación, tal como ha señalado la ingeniera informática y miembro del equipo de Inteligencia Artificial de Sngular Nerea Luis a Crónica Global, es la supervisión. Por el momento estas herramientas no son lo suficientemente autónomas como para poder operar de forma funcional sin la figura del prompt engineer, es decir, de un profesional con poco conocimiento técnico que sea capaz de explicarle a estas inteligencias de la forma más entendible posible cuál es la tarea que deben realizar.
No obstante, para la fundadora de T3chFest, estos avances plantean varias preguntas: ¿qué haremos con el tiempo que nos liberen? Y ¿algunas profesiones podrían desaparecer por completo? Recientemente hemos podido ver, por ejemplo, cómo dibujantes, fotógrafos y otros artistas visuales se han alarmado a raíz de la popularidad de Dall-E 2, Midjourney o Stable Difussion, herramientas web que generan imágenes a partir de una frase o prompt y que amenazan con hacer peligrar sus sectores en el futuro.
El metaverso en el mundo laboral
Otro “nuevo” concepto que lleva un tiempo siendo relevante en internet, pero que recientemente se ha empezado a hacer eco en los medios de comunicación tradicionales es el del metaverso. Hace un año veíamos un vídeo promocional de Meta (anteriormente conocida como Facebook) en el que Mark Zuckerberg vendía esta idea como “la siguiente evolución de las relaciones sociales” y prometía un futuro con un mundo virtual plenamente funcional no solo para el ocio, sino también para la realidad de la educación, los puestos de trabajo o los negocios.
La influencer Lauri In Metaverse, quien se dedica a hacer divulgación sobre tecnología en TikTok e Instagram, ha reafirmado a este medio su creencia de que en la actualidad existe una saturación de información y de que “todo el mundo está queriendo hacer su propia fórmula de metaverso cuando en realidad no existe todavía una definición estricta de lo que va a suponer”. Sin embargo, confía firmemente en el papel que tendrá dentro del ámbito del emprendimiento o las inversiones y piensa que su aplicación real estará muy ligada a la “gestión de comunidades”.
Una tecnología temprana
Marc Cabezas es más escéptico en esta materia y pone el ejemplo de JP Morgan, una de las mayores empresas financieras del mundo, que ya tiene su oficina en el metaverso, pero que, por el momento, solo cumple funciones relacionadas con “crear engagement en el público joven”.
Cree que es un concepto todavía muy temprano y duda de si algún día llegará a ser verdaderamente práctico para, por ejemplo, “vender hipotecas” o “realizar consultas sobre una cuenta bancaria”. “Para ciertas cosas es muy difícil que se desbanque a los móviles, a los ordenadores o a las oficinas físicas”, ha expuesto el experto en tecnologías disruptivas a este medio.
La era del algoritmo
Y si encontrar un empleo en el mundo del entretenimiento nunca ha sido tarea fácil, los creadores de hoy ven como un reto mayor encontrar su propio espacio en un mar de contenido cada vez más inmenso. Durante la jornada del Jump2Digital, el divulgador científico Javier Santaolalla dejó claro que una dificultad añadida es (y, sobre todo, será) hacer que este contenido se oiga por encima del ruido que generan los bulos, que muchas veces son premiados por el algoritmo de plataformas como Youtube.
Pero ¿cuál es el secreto para ello? Jordi Wild, quien también dio a conocer en el evento su experiencia como autor del podcast The Wild Project (el más escuchado en España), afirma que este reside en la inteligencia de saber adaptarse a las características y códigos de cada plataforma y de saber construir contenido viral con sus diferentes lenguajes. El podcaster ha definido a este portal el algoritmo como algo “impredecible” y “difícil de adiestrar”, y es por eso que aquellos que tengan la ambición de poderse ganar la vida entreteniendo a miles a través de la pantalla deberán ser constantes para descubrir cuál será la siguiente gran tendencia y estar al pie del cañón cuando lo hagan.