Los hombres de David Madí en Ambulancias Egara han perdido el único contrato de los cuatro a los que aspiraban en Castilla y León. La transportista catalana ha cedido el lote de Segovia, el único de los que logró en el macroconcurso de 736 millones, al gigante HTG después de que una filial del conglomerado impugnara la propuesta de adjudicación a la firma catalana y la mesa de contratación le diera la razón.
Según una resolución administrativa a la que ha accedido este medio, la Gerencia Regional de Salud de la comunidad (Sacyl) excluye a la empresa vallesana porque presentó su plan de igualdad el 24 de octubre de 2022 y un escrito de subsanación --para evitar ser excluida-- el 3 de noviembre. Pero el plazo de licitación "finalizó el 28 de julio de 2022". El Gobierno regional descarta por este motivo a la compañía del lote número 6, el de Segovia, el único en el que había quedado finalista. La nueva adjudicataria es Ambulancias Rodrigo, la filial de HTG.
Cero contratos de cuatro
La resolución significa que Egara deja escapar el único de los cuatro contratos a los que aspiraba en Castilla y León, un territorio en el que HTG está muy arraigada. Cabe recordar que la firma catalana quería los lotes de Ávila (uno), Salamanca (seis), Segovia (seis) y Valladolid (ocho). El Sacyl solo la propuso para Segovia, pero su rival, Rodrigo, impugnó la decisión alegando que su competidor no tenía plan de igualdad.
Imagen de un vehículo de transporte sanitario de Ambulancias Egara con un TES / Cedida
Esta hoja de ruta de género es un requisito para ser contratista de la Administración desde la Ley de Contratos del Sector Público (LCSP) 9/2017. La filial de HTG vio hueco para quitarle el contrato a la catalana, impugnó y ha ganado. Ahora, sin embargo, se abre la vía judicial, que no será corta.
Expansión frustrada
El resultado significa que Ambulancias Egara ve frustrada su expansión en el centro de España tras abrir los mercados de Aragón y Andorra. Era una apuesta harto compleja, recuerdan fuentes del sector, pues HTG es la mayor empresa del ramo y tiene su sede central en Valladolid. Sin embargo, Egara se presentó a cuatro lotes. No ha logrado ninguno.
Ese traspié llega después de los problemas en la expansión en Aragón, donde Egara ha entrado en guerra con Ambulancias Maiz, su socia en la unión temporal de empresas (UTE). Esta pugna ha generado graves problemas como impago de nóminas, un conflicto que ha estallado antes de que venza la contrata en 2024. En Andorra, Egara también ha logrado penetrar en UTE y ha encajado un conflicto laboral y tiene otro en ciernes por su negocio.
Los planes de igualdad, obstáculo
La exclusión de Egara en Castilla y León confirma que el requisito de los planes de igualdad para ser contratista de la Administración Pública no son materia menor. Antes de la catalana, el asunto le costó caro a Ambulancias Tenorio, excluida del concurso de transporte sanitario de Sevilla --donde tiene su sede-- por este mismo motivo.
Imagen de una ambulancia de Transalud Aragón, UTE que controla Ambulancias Egara / Cedida
En Aragón, Tenorio acaba de lograr el contrato de transporte sanitario urgente para los próximos cuatro años, pero sindicatos y sus rivales, que se presentaron con la marca prestada de la también catalana Consorci de Girona, estudian impugnar la adjudicación, porque la andaluza tiene el dosier de género, pero presentado a última hora y sin pactar con la parte social.
Cataluña y entorno
En el terreno político, la debacle de Ambulancias Egara en Castilla tiene otra interpretación. La transportista basculó hacia el entorno neoconvergente durante o tras el concurso sanitario de Cataluña de 2014 y 2015. En un momento dado, la tomaron al asalto directivos de la máxima confianza del empresario independentista David Madí, también exsecretario de comunicación del Govern.
En esta operación participó también desde la sombra el constructor Joan Albert Arqués, consejero delegado de Benito Arnó. Se trata de un directivo y una empresa investigados en el caso 3% de presunta financiación irregular de Convergencia Democrática de Cataluña (CDC). Tras aquella toma, Egara buscó agigantarse y crecer, pero solo lo ha logrado en Cataluña y entorno, donde tiene sinergias. Su primer movimiento más lejano ha terminado a cero.