Renfe mantiene su expansión internacional. La operadora ferroviaria pública española analiza, en estos momentos, entrar en el servicio ferroviario del Reino Unido como uno de los socios estratégicos de Grand Union Trains (GUT).
El objetivo de la compañía sería operar un nuevo enlace comercial entre Londres y Carmarthen (Gales). Este sería el primer proyecto de Renfe en el Reino Unido, que ahora estudia el regulador británico ORR. La ferroviaria nacional aportaría su experiencia en servicios comerciales, así como su conocimiento de la operación liberalizada, tras su implantación en España desde 2020.
“Importante” inversión
Este proyecto, según ha informado la operado pública, prevé una “importante” inversión para la prestación del servicio. Además, las mismas fuentes han asegurado que “podría” contar con la participación de Serena Industrial Partners, una firma de capital privado independiente de España comprometida con el desarrollo de infraestructuras sostenibles en el Reino Unido.
La compañía, no obstante, no cifra el volumen de la inversión. Aunque si que se uniría a GUT, en caso de que el regulador ferroviario avale la propuesta de Renfe, que en estos momentos desarrolla nuevos servicios de viajeros para operar entre el sur de Gales y Londres.
Proyectos internacionales
Esta sería la primera implicación de Renfe en el mercado occidental europeo. Pese a sus incursiones con trenes de alta velocidad en Francia, donde ha encontrado una dificultad extrema para llegar a París por las pegas que el gobierno francés para que sus servicios no hagan competencia a su homóloga gala SNCF.
Pero más allá de este muro que ha encontrado en país vecino, Renfe cuenta con otros proyectos internacionales en desarrollo. Estos son Harammain (el tren de alta velocidad que une Medina y La Meca, en Arabia Saudí), la participación en Texas Central (Estados Unidos) y en el impulso del proyecto Tren Maya (México), así como la entrada en el accionariado de Leo Express (Chequia).