La familia que trajo los quioscos a Barcelona propone transformarlos en 'hubs' multiservicios
La empresa Urban Service Point sella un acuerdo con los quiosqueros de la capital para instalar cajeros automáticos y 'lockers' en cerca de 300 puntos de venta de prensa
26 abril, 2022 00:00Adaptar los quioscos de prensa al siglo XXI. Esa es la propuesta de la empresa Urban Service Point (USP), que ya ha empezado a rodar en ciudades como Barcelona. La compañía fundada por la familia Sancho, vinculada históricamente al mundo de la distribución y venta de periódicos, acaba de sellar un acuerdo de colaboración con la Asociación Profesional de Vendedores de Prensa de Barcelona y Provincia (APVPBP) para convertirse en el socio de confianza para transformar estos puestos en hubs multiservicios.
"Hemos vivido el auge, la madurez y la decadencia de este sector y ahora queremos ayudarle a superar su crisis", explica Luis Sancho Mañas, tercera generación de empresarios del papel que también posee la agencia publicitaria en espacios exteriores Concoris. ¿Cómo? A través de la incorporación de negocios adicionales que complementen la actividad principal de los locales y, a su vez, los conviertan en una red de servicios para los ciudadanos.
De los diarios a las motos eléctricas
Como detalla Sancho, USP ha lanzado por el momento tres verticales: la instalación de cajeros bancarios (ATM), la incorporación de puntos de reparto de última milla a través de lockers --pequeños buzones para recoger paquetes comprados de forma online-- y la creación de una red de carga para microvehículos eléctricos como motos y patinetes --esta última pata se halla en fase incipiente--. "En ocasiones sumar todos estos elementos se vuelve un Tetris", bromea el empresario, que junto a su padre dirige USP.
La compañía se muestra cauta en sus objetivos a medio plazo, aunque ofrece algunas previsiones. En una primera etapa, se prevé que más de 100 quioscos barceloneses cuenten al menos con un ATM. Mediante la instalación de lockers, se prevé superar la entrega de 10.000 paquetes mensuales a finales de 2022. La firma no da detalles sobre la inversión necesaria para desarrollar este plan, que aguarda el aval definitivo del Ayuntamiento de Barcelona. "No se necesita ningún cambio normativo en la capital y contamos con el apoyo de los propietarios. Esperamos que el consistorio dé su visto bueno", asevera.
Negocio en toda España
La propuesta llega en un momento delicado para el sector. Según las cifras manejadas por la empresa, se estima que más de 1.000 quioscos han cerrado entre 2010 y 2018. En concreto, en Barcelona más del 35% de establecimientos ha cesado su actividad a lo largo de estos años. Actualmente solo quedan 300 puestos en concesión --a diferencia de otras ciudades, en la capital catalana el activo físico pertenece al consistorio--, de los cuales 55 ya han bajado la persiana.
Pese a estos números, Sancho se muestra optimista. E incluso apunta a nivel nacional. "En Málaga ya hemos adaptado cuatro quioscos. En Barcelona, seis. Queremos llegar a los más de 6.500 quioscos públicos de toda España. Solo en Madrid hay 400", detalla el directivo. Además, pone en valor la apuesta integral de la compañía frente a los tanteos de otros competidores que tan solo han ofrecido una alternativa para modernizar estos espacios. Además, la estrategia de USP se ha cocido a fuego lento. En total, la privada ha desarrollado en los últimos años cerca de 70 pilotos entre Barcelona y Málaga, a los que se unirá Madrid en los próximos meses.
Una saga de papel
"Los quioscos de prensa ubicados en la vía pública son un elemento esencial e imprescindible en la vida de un barrio, de una ciudad. No sólo garantizan al ciudadano el derecho a la información sino que ofrecen una serie de servicios que, gracias a la colaboración con USP, se adaptarán y actualizarán a las nuevas necesidades", ha explicado Margarita Céspedes, presidenta de APVPBP.
Hacerlo de la mano de una saga vinculada al negocio ofrece garantías. En los años 50, Luis Sancho --padre y abuelo de los fundadores de USP-- creó la primera distribuidora de prensa y revista para ofrecerlas en los quioscos. "Por aquel entonces, distribuía el producto a más de 500 puntos
de venta de prensa y revista tanto en Barcelona como en el resto de Cataluña. A la vez creó una red propia de más de 100 puntos de venta", rememora el nieto. Casi setenta años después, la misma familia quiere brindar una segunda vida a unos emplazamientos tan queridos como olvidados.