Los 35.000 millones que el Covid debe a los gigantes del Ibex dos años después
Las tres compañías españolas de mayor capitalización, junto a otras 20 del selectivo, aún registran precios inferiores a los previos al hundimiento bursátil provocado por la pandemia dos años después
20 febrero, 2022 00:00Hace justamente dos años, los principales mercados bursátiles comenzaron a protagonizar el mayor derrumbe que se recuerda desde la Gran Depresión, como consecuencia del avance imparable del coronavirus. Las secuelas aún siguen muy perceptibles en un Ibex 35 que sigue aún lejos siquiera de atisbar las cotizaciones que lucía justo antes de la monumental debacle. Una circunstancia que se explica, entre otros factores, porque sus tres mayores componentes, Inditex, Iberdrola y Santander, aún acumulan retrocesos superiores al 10% respecto a hace 24 meses. La pandemia aún “les debe” unos 35.000 millones de euros.
Sin duda, son valores que marcan tendencia; no en vano, suponen cerca de un 42% de la capitalización total del selectivo. Pero el hecho de que el indicador de referencia de la bolsa española sea el único del mundo occidental que aún cotice por debajo de la llegada de la pandemia, en torno a un 14% concretamente, también se explica por el hecho de que otros 20 de sus componentes también presentan hoy en día precios inferiores a los de aquel 19 de febrero de 2020.
El componente 'macro'
En plena época de presentación de resultados anuales, las grandes cotizadas españolas ofrecen al mercado claras señales de haber dejado atrás la complicada situación de la pandemia; en algunos casos, con cifras incluso superiores a las del año 2019, el inmediatamente anterior a la llegada del virus.
Sin embargo, el componente macroeconómico parece influir más de lo esperado pese a que gran parte de estas empresas basan su facturación en los mercados internacionales y no dependen tanto de la economía nacional.
El doble golpe a Inditex
“No obstante, no deja de ser un referente. España fue la economía desarrollada que más se hundió en 2020 con diferencia y las primeras estimaciones apuntan a que su ritmo de recuperación en 2021 ha sido un tanto decepcionante”, apuntan desde un banco de inversión internacional.
Sin duda, uno de los casos que más llaman la atención es el de Inditex. Su rendimiento en estos dos años se encuentra entre los diez peores del Ibex 35 en el periodo. El imperio de Amancio Ortega cotiza aún algo más de un 20% por debajo de los precios que reflejaba antes del hundimiento bursátil de febrero de 2020, cuando su capitalización rozaba los 100.000 millones de euros.
Incertidumbre
En la actualidad, se mueve en el entorno de los 80.000 millones; pese al notable desempeño del negocio, gracias al crecimiento exponencial de su canal online, lo cierto es que aún padece los efectos de haber permanecido durante muchos meses con gran parte de sus establecimientos cerrados por completo.
El anuncio del próximo relevo de Pablo Isla al frente de la gestión del grupo ha terminado de llevar la incertidumbre al valor, castigado por los inversores por una decisión que muchos consideran errónea. La figura de Óscar García Maceiras como consejero delegado despierta aún muchas dudas, más allá de que la presidencia no ejecutiva vaya a ser asumida por Marta Ortega, un movimiento que prácticamente se descontaba.
No todo es la pandemia
Precisamente, poco antes del anuncio del relevo, que se hizo a finales de noviembre, Inditex cotizaba muy cerca de los precios previos a la caída de los mercados. Pero, por el momento, no puede con este segundo impacto.
“Hay que tener en cuenta que en dos años suceden muchas cosas; no todo ha sido la pandemia y determinados valores han tenido que lidiar con otros factores negativos, que han sido un lastre para reponerse de tal batacazo”, apunta la fuente.
La banca, lastrada
Por distintas circunstancias, han sido los casos de Iberdrola y Santander. La eléctrica, a cuyas acciones aún les resta por recuperar algo más de un 11%, se ha visto penalizada por la instrucción del caso Villarejo que, como la propia empresa ha admitido, ha provocado que una de sus operaciones más importantes de los últimos tiempos como la adquisición de PNM Resources para crear junto a su filial norteamericana Avangrid un gigante en EEUU se haya quedado, por el momento, en el aire.
Igual que el resto del sector financiero, Santander ha padecido los efectos de un escenario prolongado de tipos de interés negativos, además de los efectos de la crisis en cuanto al desplome del consumo y la posterior inflación disparada, uno de los desafíos a los que tendrá que hacer frente la banca en los próximos meses. No obstante, su situación de cotizar un 10% por debajo de cómo lo hacía en febrero de 2020, no es compartida por todos los valores del sector.
La fusión impulsa a Caixabank
El contrapunto lo ponen Caixabank y BBVA, que sí han sido capaces de dejar atrás el Covid-19 también desde el punto de vista bursátil. En el caso del primero ha salido de la crisis reforzado con la integración de Bankia, que le ha convertido en el mayor banco del país por volumen de activos. Sus acciones son ahora algo más de un 17% más caras que en el momento del desplome. Las de BBVA han avanzado un 11%, tras cerrar con éxito su ajuste de plantilla y la venta de su negocio en EEUU, y pese a la penalización por una apuesta por Turquía que los mercados no terminan de ver clara.
Sin embargo, la losa de los tres grandes valores es demasiado pesada y lastra al Ibex, que marcha a contracorriente del resto de índices europeos de referencia, cuyo balance en estos dos años va desde la revalorización próxima al 20% del AEX de Amsterdam a la cercana al 11% del DAX de Francfort, pasando por el 13% que se anota el CAC de París.
Rovi, el gran beneficiado
Al otro lado del Atlántico, pese al errático comienzo de 2022, Wall Street toma la delantera. Dos años después de la hecatombe del coronavirus, el Dow Jones cotiza un 17% por encima de entonces; el S&P 500 se ha revalorizado más de un 29% y el Nasdaq, en torno al 40%.
No obstante, este periodo bianual ha sentado notablemente bien a algunos valores del selectivo. Por encima de todos, a uno de los que no figuraba en el selecto club en aquel momento: Laboratorios Rovi. Sus acciones se han disparado por encima del 170% en este tiempo. Fluidra cotiza hoy un 92% por encima de entonces y Arcelor Mittal, cerca de un 75%.
El desplome de IAG
En el extremo opuesto, un nombre por encima del resto (o, en este caso, por debajo): IAG, que se ha dejado tres cuartas partes de su capitalización en un infierno bianual para el sector de la aviación comercial, sin duda uno de los más golpeados por la pandemia.
También tendrán difícil levantar cabeza Grifols (-57%) y Colonial (-40%). Pese a la remontada de las últimas semanas, Telefónica, que logra mantenerse a duras penas entre las diez primeras del índice por capitalización, aun cotiza un 23% por debajo de la fecha fatídica.