La CEOE ha vuelto a rechazar con rotundidad la subida del salario mínimo interprofesional (SMI). Tanto la patronal dirigida por Antonio Garamendi como Cepyme han reiterado su oposición, que ya dieron a conocer en septiembre de 2021, a una actualización del SMI hasta los 1.000 euros, tal y como plantean los sindicatos y el Ejecutivo central. "La propuesta del Gobierno es inasumible", han destacado en un comunicado. Ello pese a que la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se ha mostrado dispuesta a pactar la subida únicamente con CCOO y UGT.
La CEOE ha subrayado que "mientras la remuneración de los asalariados prácticamente ha recuperado los niveles previos a la crisis, el excedente bruto de explotación todavía está muy lejos de normalizar su situación y continúa siendo un 6,6% inferior al de 2019". "Esto implica que las empresas van retrasadas en la recuperación de la normalidad y es un reflejo de la difícil situación que aún vive el tejido empresarial", ha manifestado la patronal.
"No es el momento"
En este contexto, ambas organizaciones empresariales han considerado que "no es el momento" de aplicar una nueva subida del SMI. "Parece responder más a una aspiración política en el seno del Gobierno que a la lógica económica", han sugerido. Por contra, la CEOE ha propuesto que el aumento de rentas se cimiente sobre una mejora de la formación, la inversión y el desarrollo tecnológico.
Por otro lado, la patronal ha puntualizado que este posicionamiento se ha tomado por unanimidad. En este caso, no se ha producido ninguna fisura interna como sí ocurrió con el aval de la CEOE al acuerdo laboral pactado a tres bandas con los sindicatos y el Ministerio de Trabajo en diciembre del año pasado.
Subidas desde 2019
La organización empresarial también ha recordado que, desde 2019, el salario mínimo ha encadenado alzas de hasta el 30%. El último de estos aumentos se aprobó en septiembre de 2021, cuando los sueldos básicos se incrementaron un 5,2%.
A este encarecimiento de los costes de contratación hay que sumar la correspondiente subida de las cotizaciones sociales, "conformando un coste total por empleado para las empresas muy superior a esos 1.167 euros mensuales que se proponen y que sobrepasaría los 1.500 euros en términos generales".
Diálogo social
La oposición frontal de la CEOE termina con el idilio entre Trabajo y la patronal, que habían logrado cerrar in extremis un pacto laboral de mínimos a finales del año pasado. La negativa a la subida del SMI coincide con los tanteos para hallar un terreno común en el ámbito del Acuerdo Interconfederal para la Negociación Colectiva (AENC).
El acuerdo sobre los mínimos que deberán marcar la renovación de los convenios colectivos este 2022 será la próxima ocasión en que se pondrá a prueba el diálogo entre los agentes empresariales y el Gobierno.