El BCE empuja al bono español a rentabilidades negativas por primera vez
La ampliación del programa de compra de deuda por parte del organismo emisor confirma que España podrá financiarse sin coste al menos durante el próximo año
11 diciembre, 2020 13:45La rentabilidad del bono español a 10 años ha cotizado este viernes en negativo en el mercado secundario por primera vez en la historia, apenas unas horas después de que el Banco Central Europeo (BCE) anunciara la ampliación en medio billón de euros de su programa de compra de deuda soberana, en el marco de la crisis del coronavirus.
La evolución del activo de referencia español culmina así una trayectoria que ha llevado a su rentabilidad a caer un punto desde el inicio de la pandemia, precisamente cuando el organismo emisor comenzó a poner en marcha medidas de choque para evitar que se desencadenara una crisis de deuda.
Caída de un punto
Por entonces, a mediados de marzo, la rentabilidad del bono a 10 años se situaba en torno al 1,2% mientras que la prima de riesgo, el diferencial con el rendimiento del bono alemán, se iba por encima de 150 puntos básicos.
A primera hora de este viernes, el bono español llegó a marcar rentabilidad negativa, aunque de forma simbólica (apenas cinco puntos básicos), mientras que la prima de riesgo se mantenía, como en los últimos días, algo por encima de 63 puntos básicos.
Mínimos en la eurozona
El pasado martes fue el bono portugués el que alcanzó el hito de la rentabilidad negativa por primera vez en su historia, toda vez que el mercado daba por descontado que el BCE iba a elevar la dotación del programa de compra de deuda y que los emisores iban a responder sacando más papel al mercado.
De hecho, buena parte de los bonos de los países del euros cotizan también en sus mínimos históricos de rentabilidad. Es el caso de Portugal, anteriormente citado, y el de Italia, con una rentabilidad nunca antes tan reducida del 0,5%.
El refugio del bono alemán
En el caso de Alemania, el rendimiento del bund se aproxima al -0,65, lo que supone los mínimos desde los primeros días posteriores al estallido de la pandemia.
Con los inversores huyendo en estampida de las bolsas y buena parte del mundo conmocionado, las compras masivas de bonos de la primera potencia europea llevaron al bono germano a mostrar un rendimiento inferior al -0,85%.