Las subcontratas de Nissan también se hartan. Más de un centenar de trabajadores de Marelli, proveedor de la firma automotriz japonesa, se han concentrado hoy ante la sede de la compañía en Barcelona para pedir producción y salvar los empleos.
Los empleados se han desplazado a la nave situada en Santa Margarida i els Monjos (Barcelona) ante la noticia de que la marca de componentes está ultimando la entrega de documentación para pedir un expediente de regulación de empleo (ERE) por cierre. La causa de los despidos es que la firma trabaja casi al 100% para Nissan, que ya ha anunciado que se retira de Barcelona en otoño.
"Apoyo a los trabajadores"
Ante ello, los empleados de la factoría, hasta ahora afectados por un expediente de despidos temporales (ERTE), han convergido ante las puertas de las oficinas de la enseña en la localidad barcelonesa.
Han permanecido allí varias horas para presionar a la dirección y arropar a la plantilla, que será uno de los colectivos afectados por la fuga de la multinacional nipona, que se replegará a Francia y Reino Unido.
Nissan oficializa su ERE
La protesta de los trabajadores de Marelli se ha producido el mismo día en el que la dirección de Nissan Ibérica ha presentado el ERE para 2.525 personas por, también, la clausura de tres plantas en la Zona Franca de Barcelona, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca.
La cifra de propuesta de despidos es menor que la que se barajaba inicialmente, unas 3.000 personas, porque la firma automotriz ha decidido mantener los centros de El Prat de Llobregat, que emplea a 110 personas, y el centro técnico y de compras, que totaliza una plantilla de otras 400. La continuidad de este último centro de trabajo, no obstante, dependerá de la negociación del ERE con los sindicatos.