El sector de bares y restaurantes vive --y seguirá viviendo durante las próximas semanas y meses-- las consecuencias del coronavirus, y no solo en su facturación. Grandes cadenas internacionales de restauración han presentado expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) como medida para salvaguardar sus cuentas. Y, según el caso, han encontrado más o menos dificultades para ello.
En un primer momento, muchas de estas compañías vieron en el reparto a domicilio una vía para reducir el impacto de las medidas del estado de alarma, una fórmula que el Gobierno permite mientras permanezca el cierre del comercio físico. Pero aún así, muchas han optado por reducir temporalmente su plantilla, lo que ha afectado a millares de personas.
Alsea: ERTE casi total
La compañía mexicana Alsea es dueña de grandes cadenas de restaurantes como son Vips, Ginos, Domino's Pizza, Starbucks y Cañas y Tapas. A mediados de marzo comunicó que presentaría un ERTE que afectaría a la totalidad de su plantilla, de unos 22.000 trabajadores. España es el segundo mercado en el que mayor presencia tiene Alsea, después de México, gracias a los 1.070 establecimientos que nutren su red en las diferentes marcas.
Algunas de las cadenas de Alsea ofrecían delivery, por lo que el expediente regulador al 100% de los empleados fue paralizado por Trabajo. El ministerio público requirió a la empresa descontar en el número de trabajadores afectados por el ERTE a aquellos necesarios para mantener el reparto a domicilio --actividad esencial durante la reclusión por coronavirus--. Unas 1.600 personas quedaron exentas, por lo que el ERTE afectaría al 98% de la plantilla.
Burger King: Unos 12.300 empleados en ERTE
La cadena de comida rápida Burger King es otra de las que ha presentado un expediente de regulación temporal de empleo. La evolución de éste fue muy similar a lo ocurrido con Alsea: el ERTE al 100% de trabajadores por "fuerza mayor" fue rechazado y el Gobierno obligó a la compañía a mantener en nómina a las personas necesarias para ofrecer servicio de comida a casa.
Este revés llevó a Burger King a abrir las cocinas de un centenar de establecimientos y mantener en su puesto de trabajo a unos 1.700 trabajadores de una plantilla de unas 14.000 personas. Es decir, que finalmente el ERTE de la cadena de comida rápida afectaría a unos 12.300 empleados.
AmRest: ERTE a 3.600 empleados
AmRest es la empresa matriz que controla las cadenas de restauración La Tagliatella, Bacoa y parte de la red de KFC en España. Su ERTE se conoció a finales de marzo, cuando la propia compañía comunicó que dejaría de pagar la nómina a 3.666 empleados en nuestro país como medida para "mitigar el impacto generado por la crisis desatada por el Covid-19".
El número de trabajadores es menor que en las compañías anteriormente citadas, pero significa que el 93% de la plantilla ha quedado suspendida de sueldo. Los 143 restaurantes propios de la empresa en España echaron abajo la persiana.
Telepizza: 1.500 personas en ERTE
El grupo Telepizza retrasó la presentación de expedientes laborales hasta principios de abril, cuando acordó con los sindicatos las especificaciones de dos ERTE en la compañía. Uno de ellos se deduce de causas de "fuerza mayor" --es decir, por el coronavirus-- mientras que el segundo tiene "razones productivas". El número de trabajadores afectados asciende a 1.500 (826 personas el primero y 693 personas el segundo).
La compañía de pizzas y comida rápida se comprometió a complementar el subsidio de los empleados del ERTE en un 10%. Con ello, la plantilla tendrá garantizado el 80% de su sueldo base durante abril y mayo.
Taco Bell: ERTE sobre un millar de trabajadores
La compañía de comida rápida de estilo Tex-Mex Taco Bell (Restabell Franquicias) cerró todos sus restaurantes y suspendió el servicio a domicilio durante la pandemia en España. Tras ello, presentó en Trabajo un ERTE a la totalidad de la plantilla, que consta de 1.003 empleados.
La empresa aseguró que todos ellos serían reincorporados a sus puestos "una vez la actual situación retorne a la normalidad y los restaurantes puedan volver a abrir con garantías", tal como indican las bases de los expedientes laborales temporales. Y no solo eso: prometió que aumentaría el número de trabajadores en España en unas 450 personas, es decir, un 50% más de los actuales.
Muerde la pasta: 1.000 emplados bajo el ERTE
El grupo de restauración Tastia, más conocido por el nombre de su cadena de comida italiana Muerde la pasta, presentó en marzo un ERTE sobre 1.000 de sus trabajadores propios. La compañía también cuenta con restaurantes franquiciados --que también se han visto afectados por el cerrojazo debido a la emergencia sanitaria por coronavirus--, por lo que el número de afectados podría ser mayor.
Además de estos establecimientos, Tastia cesó la actividad de sus filiales Benfood, que fabricaba los productos a distribuir en los restaurantes y que era proveedor de otras empresas, y Benworks, una línea de negocio dedicada al área inmobiliaria dentro de la hostelería.