Están siendo semanas tremendamente complicadas. Mientras millones de personas se refugian en casa para que el virus no continúe su escalada de contagios, el tejido empresarial y las instituciones económicas intentan buscar alternativas para que la crisis económica no cree un caos absoluto en la economía micro y macro.

Para ello, decenas de empresas españolas e internacionales se han visto obligadas a cambiar su modelo de negocio, bien para ayudar o bien para buscar rentabilidad. 

Dos ejemplos de reorientación de su negocio para no caer en pérdidas son Cabify y Airbnb. La primera de ellas anunció esta semana un nuevo servicio de envío de paquetes a través de su aplicación. Los usuarios podrán solicitar en su plataforma con un coste cercano a 10 euros. El conductor llevará el paquete a la dirección que se haya introducido en la app guardando todas las medidas de seguridad.

En cuanto a la plataforma de pisos vacacionales, la dirección ha decidido lanzar Experiencias Online, una nueva forma de conectar con sus clientes y generar ingresos durante la reclusión. Así, Airbnb ofrece experiencias virtuales como meditación con monjes budistas, viajes virtuales, cocinar con chefs conocidos o predicciones de tu futuro.

Actualmente, pueden reservarse más de 50 experiencias virtuales en Airbnb disponibles, a las que se sumarán muchas más en los próximos meses. Estas experiencias online tendrán lugar a través de Zoom.

Seat también ha dado un giro radical a su producción durante las últimas semanas. La firma de coches, que aplicó un ERTE debido al parón de la economía, utiliza su maquinaria y sus accesorios de automóviles para fabricar respiradores, que tanta falta hacen en las UCI de los hospitales españolas. La compañía ya ensambla 100 respiradores al día y prevé alcanzar las 300 unidades pronto.

Inditex y ropa sanitaria

Inditex fue una de las pioneras en poner a disposición de la sanidad su red logística para ayudar a parar al coronavirus. La compañía de Amancio Ortega ha vuelto a sus orígenes y fabrica miles de prendas para hospitales como batas o ropa médica especializada. El empresario gallego confeccionaba prendas de casa como albornoces bajo la marca de GOA (Amancio Ortega Gaona, al revés).

“Estamos explorando la posibilidad de convertir parte de nuestra capacidad de fabricación textil en producción de material sanitario, para cuyo objetivo se ha involucrado al equipo de producción de Inditex. En este sentido, se ha identificado la alternativa de fabricación de batas protectoras en España, para lo que es necesario realizar una serie de ajustes sanitarios y confirmar la disponibilidad de materia prima”, dijo en un comunicado.

Alcohol, material en 3D…

Tous, empresa dedicada a la joyería, también ha puesto en marcha su logística para frenar al coronavirus y está produciendo tubos de paso de oxígeno gracias a sus máquinas de impresión 3D para las Unidades de Cuidados Intensivos. 

La fábrica de ron canaria Arehucas paró su producción habitual de la bebida espirituosa para crear geles hidroalcohólicos y alcohol sanitario. El mismo caso se repite en el caso de Repsol, que embotella hidrogel para mejorar la higiene de nuestras manos.