Los taxistas más combativos amenazan de nuevo el Mobile World Congress

El Mobile World Congress vuelve a convertirse en medida de presión de los taxistas en su guerra contra los vehículos con licencias VTC. Élite Taxi, la asociación de taxistas más representativa del área metropolitana de Barcelona, ha amenazado con movilizaciones durante su celebración como medida de coacción para hacer cumplir la normativa que regula la actividad de los coches con conductor ya que, según sus miembros, no se está llevando a cabo. 

La asociación de taxistas fundada y liderada durante años por Tito Álvarez, ha llamado a todas las asociaciones y radioemisoras de taxis barcelonesas a reunirse el viernes para "proponer medidas de presión" para que se cumpla el decretazo de la Generalitat y el del Ayuntamiento de Barcelona. Ambos con el mismo fin, limitar el trabajo de los VTC, pero con restricciones diferentes.

Tito Álvarez, fundador de la asociación de taxistas Élite Taxi / EUROPA PRESS

Batería de medidas

Élite Taxi ha anunciado que se presentará en la reunión con "una batería de medidas" graduales que desembocarán en la susodicha movilización durante el Mobile. La asociación pide como requisitos para evitar estas concentraciones una mayor firmeza por parte de las instituciones en la aplicación normativa, así como que los VTC lleven de manera visible el precio en su interior y que identifiquen sus días de descanso.

Los taxistas quieren acabar, incluso, con una característica técnica del servicio de las empresas que utilizan estas licencias de transporte. Defienden que debe vetarse la geolocalización de los coches de Cabify, la compañía de VTC más conocida que continúa operando en Barcelona --Uber retiró su servicio después de la aparición de la restrictiva normativa de la Generalitat--.

Colas para coger un taxi en el MWC el pasado mes de febrero / CG

Precontratación

El decreto ley aprobado por el Govern fija, entre otros detalles, que los servicios ofrecidos por las compañías y los conductores de VTC deben tener una precontratación mínima de 15 minutos, algo que va en detrimento de su actividad frente al sector del taxi, que ha acaparado la inmediatez en el transporte. Esta medida es incluso más restrictiva en la ciudad de Barcelona y alrededores, ya que el AMB, con Ada Colau a la cabeza, aumentó el tiempo de precontratación a una hora.

La medida no tuvo buen recibimiento por parte de las compañías afectadas y tampoco por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), quien aseguró que este punto era "contrario" a las leyes de la competencia. Tanto el organismo nacional como empresas VTC presentó recursos judiciales contra la normativa metropolitana para revertir su imposición.