La justicia ha dado el primer paso para tumbar el reglamento que aprobó el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), capitaneada por Ada Colau en la pasada legislatura, para cortar el paso a Cabify. La patronal de vehículos de transporte con conductor (VTC) Luxury VTC ha conseguido que el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) admita a trámite un recurso contencioso-administrativo que pide la suspensión de la norma. Ésta amplía de 15 a 60 minutos la precontratación de las plataformas lo que, a nivel práctico, supone su liquidación por ser anticompetitivas.
La segunda instancia judicial ha dado luz verde inicial al escrito de la organización empresarial. El recurso, elaborado por los servicios jurídicos de Luxury VTC, se suma a otro anterior interpuesto por la patronal mayoritaria del sector: Unauto. Cualquiera que fuere su posición, es el primer intento de calado para dejar sin efecto el reglamento metropolitano, que fue aprobado el 21 de mayo --a cinco días de las elecciones municipales y europeas-- y entró en vigor el lunes, 1 de julio. "Queremos que se suspenda la norma por el daño que está haciendo a las VTC tradicionales", explicó Sergi Aduà, presidente de Luxury VTC. Según él, el hecho de que el TSJC le haya dado trámite "es un primer paso positivo".
"Nos condena a desaparecer"
Según el directivo, el reglamento [consultar aquí] les causa un "daño irreparable en la medida en que impide trabajar los días que queremos y las horas que deseamos". Bajo el punto de vista de Aduà, "es entendible que se limiten los días de explotación y las horas pero, ¿y los turistas de alto nivel que contratan un coche durante siete días? Estos son los visitantes que buscamos, que nos interesan, ya que dejan mucho dinero y ocasionan menos impacto", ha defendido. "¿Qué les tengo que decir --ha continuado--, que les dejamos sin transporte durante dos días porque mi vehículo está inactivo por orden del Área Metropolitana?".
En opinión del también empresario de VTC tradicionales, las dedicadas al transporte exclusivo y que no compiten con el taxi, "nos limitan los días y horas, nos limitan el tipo de coche y los turnos de los trabajadores. Yo necesito coches disponibles las 24 horas, pues los turistas premium los pueden necesitar en cualquier momento. Es evidente que tendré varios turnos de empleados. ¿Por qué no puedo operar día y noche? ¿Por qué tengo que decirle a mi cliente que debe esperar 60 minutos hasta ir a buscarlo?", ha defendido.
Taxistas: "Las cautelares no fueron admitidas"
Esta primera amenaza sobre el reglamento metropolitano de explotación de las VTC, que salió adelante en mayo con el voto de Entesa (Barcelona en Comú), PSC y la CUP, la abstención de ERC y el PDeCAT, y el rechazo de Ciudadanos y PP, no asusta a los taxistas. Alberto Tito Álvarez, portavoz de Élite Taxi, ha recordado a este medio que "el propio TSJC negó las medidas cautelarísimas a Luxury VTC, lo que permite a la norma seguir en vigor".
Según Álvarez, "el taxi de Barcelona peleó mucho por esta ley y no vamos a permitir que nos la tumben". En este sentido, además de los escritos de Unauto y Luxury que piden la paralización, se preparan acciones similares por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y la Autoridad Catalana de la Competencia (Acco). Si el TSJC tumbara el reglamento, éste sería el segundo intento fallido del AMB de poner el cepo a Uber y Cabify. El primero, en julio de 2018, ya fue suspendido y derivó en dos huelgas de taxistas en Barcelona que se extendieron al resto de España.