El gobierno metropolitano de Barcelona, que comanda la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha aprobado de forma definitiva el cerrojazo a Uber y Cabify. El Área Metropolitana ha cerrado el mandato con un último pleno en el que ha dado luz verde a la barrera para cortar el paso a los vehículos de transporte con conductor (VTC), los que utilizan las plataformas para competir con el taxi.
El documento, que concitó la oposición de la Autoridad Catalana de la Competencia (Acco), ha visto la luz de forma definitiva con el sí los grupos de Entesa (BComú), PSC y CUP. Han votado en contra el PP y Ciudadanos, mientras que Junts per Catalunya (JxCAT) y ERC, que ya aprobaron un primer cortapisa contra los VTC en forma de reglamento autonómico en febrero, se han abstenido. Ello no ha sido suficiente para apaciguar al sector del taxi, que se ha mostrado furioso contra los independentistas, al no entender su abstención. Ha cargado contra ellos el sindicato mayoritario del taxi de Barcelona, Élite Taxi.
Precontratación de 60 minutos
La norma aprobada hoy en el pleno metropolitano del AMB, entre otras medidas, amplía de 15 a 60 minutos el tiempo mínimo de precontratación de un VTC en los municipios de Barcelona y su conurbación. Recoge así el reglamento el testigo a la normativa autonómica, que dejó la puerta abierta a que entes supramunicipales y locales la ampliaran.
Dicho y hecho. BComú, PSC y CUP han pasado el rodillo y han aprobado la restricción a la explotación de las autorizaciones VTC. Lo han hecho incorporando las alegaciones parciales de Iban Sesma, de Élite Taxi; el sindicato STAC; Unauto VTC, Unauto VTC Catalunya; el grupo metropolitano del PP; el Ministerio de Fomento; Autocares Ízaro y Maxi Mobility Spain. Por contra, ha desestimado el gobierno supralocal las consideraciones presentadas por Ciudadanos.
Élite Taxi ata en corto a los partidos
La aprobación no ha sido suficiente para calmar al taxi. Élite Taxi, que anunció que "vigilaría de cerca la votación, presentándose incluso y si era necesario a los actos de campaña de los partidos políticos", ha cargado contra la abstención de ERC y JxCAT y ha anunciado que pedirá explicaciones a los dos partidos secesionistas.
Por su parte, la patronal de empresas de VTC Unauto ha sido mucho más comedida y se ha limitado a retuitear el informe de la Acco en el que la autoridad procompetencia valoraba que la propuesta de reglamento aprobada hoy era "injustificadamente restrictivo de la competencia y perjudicaba gravemente los usuarios".