Primeras sanciones a Cabify por burlar el decreto de la Generalitat

Sigue la guerra entre Cabify y el Govern, esta vez con el desafío de su filial Prestige Limousine a la Generalitat por reinterpretar la precontratación de los 15 minutos. El ejecutivo catalán ha sancionado a la empresa de transportes por "incumplir" con la obligación de que sus vehículos de alquiler con conductor se contraten con la antelación mínima correspondiente. 

El Govern abre este expediente tras haber "constatado en inspecciones a pie de calle" que no se respetan estos tiempos. Este se suma al expediente informativo que ya interpuso la consejería de Territori de la Generalitat el pasado 11 de marzo a la compañía dirigida por Juan de Antonio y cuya inspección sigue su curso. 

Último aviso

El Govern ha dado diez días más a la compañía para que “informe de manera clara e inequívoca sobre la manera cómo está operando en Cataluña”. En concreto, pidió a Cabify que detallara los servicios realizados entre los días 7 y el 10 de marzo, posteriores por lo tanto a la entrada en vigor de la nueva regulación, e incluso le instó a detallar la hora de contratación y el inicio de la prestación del servicio.

Tras las huelgas de taxistas a las puertas del Mobile World Congress, la consejería presidida por Damià Calvet impulsó un decreto-ley para regular a las VTC en territorio catalán que obligaba a una precontratación de 15 minutos para cada servicio, tener que volver a la base y eliminar la geolicalización de sus teléfonos. Eso provocó que tanto Cabify y Uber decidieran abandonar territorio catalán, y más después del anuncio de Ada Colau de ampliar la precontratación a una hora en el Área Metropolitana de Barcelona. 

Burla a Calvet

¿Por qué opera Cabify a través de Prestige Limousine? Porque a través de esta empresa actúa como "agencia de transportes" en lugar de viajes como hace en el resto de España, cuyos clientes aceptan sus condiciones una vez se registran en su aplicación para pedir sus servicios. En dicho contrato, la empresa asume toda la responsabilidad frente al usuario y para ello dispone de un seguro de responsabilidad civil de hasta 50 millones de euros. 

La burla a los 15 minutos se establece por el cambio entre "contratación" y "solicitud". La compañía argumenta que al ser un contrato vigente de un año renovable entre la persona y la empresa, la precontratación de los 15 minutos únicamente debe producirse durante el primer servicio. De hecho, es cuando comienza el contrato.