Es el pinchazo de la huelga independendentista al desnudo, de un vistazo. El paro secesionista convocado para protestar contra el juicio a los líderes del procés que se está celebrando estos días en el Tribunal Supremo no ha cumplido el objetivo que esperaba: "pararlo todo", como pretendían sus organizadores. El consumo eléctrico ha variado ligeramente a la baja respecto a jueves anteriores, aunque sin grandes variaciones.
Gráfico de consumo eléctrico en España el jueves, 21 de febrero de 2019 / REE
Según el gráfico de demanda de electricidad en España que difunde Red Eléctrica Española (REE) a tiempo real [consultar aquí], hasta las 10:00 horas de la mañana el consumo de energía en el país ha alcanzado los 34.934 megavatios. Esta cifra por sí sola apenas dice nada. Ayer miércoles, 21 de febrero, la misma cifra ascendía a 34.975 megavatios a la misma hora. En otras palabras, en 24 horas, el consumo eléctrico ha caído un 0,12%. Comparando con el resto de jueves de febrero, los descensos son mayores, aunque no significativos. El jueves 14, a las diez de la mañana, uno de los dos picos de consumo diario, se demandaron en España 35.615 megavatios; por 36.336 megavatios el jueves 7 de febrero y 36.632 megavatios el jueves, 31 de enero. Por lo tanto, las caídas de consumo son del -1,91%; -3,86% y -4,64%, respectivamente, comparado con 7, 14 y 21 días atrás.
Muy inferior al 3 de octubre
El dato, que habitualmente es utilizado para medir el impacto de una protesta laboral generalizada, es especialmente significativo cuando se compara con otros paros. El 3 de octubre de 2017, el primer paro de país independentista tras el referéndum ilegal de independencia del 1 de octubre en Cataluña, el consumo eléctrico cayó hasta un 10,5%, según el Gobierno. En otras huelgas anteriores, como la general europea del 12 de noviembre de 2012 o la del 29 de marzo de 2012, las fábricas, centros de trabajo y hogares españoles demandaron hasta un 18% y un 24% menos que la media.
Gráfico de consumo eléctrico en España el martes, 3 de octubre de 2017 / REE
Anteriormente, con el paro convocado por Comisiones Obreras (CCOO) y UGT el 29 de septiembre de 2010 contra la reforma laboral aprobada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, el consumo eléctrico llegó a descender un 28% producto de la elevada participación en la protesta que afecta, aunque no de forma lineal, a la actividad económica.
Los convocantes 'venden' una "alta participación"
La insignificante o muy reducida --según el día con el que se compare-- caída de la demanda de electricidad en España hasta las 10:00 horas no ha sido óbice para que los convocantes de la movilización independentista contra el juicio a la cúpula del procés y el Govern se haya felicitado por la "elevada participación" o hayan aportado datos de participación notables. Intersindical-CSC, la minúscula agrupación que promueve el expresidente catalán prófugo, Carles Puigdemont, se ha defendido con una cifra: el descenso del 11,4% del tráfico rodado en el área metropolitana de Barelona. Ustec, sindicato mayoritario en la enseñanza, ha asegurado que el 50% de maestros y personal laboral han secundado la protesta.
Por su parte, el Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias, que comanda el conseller Chakir el Homrani (ERC), ha indicado que el 68% del transporte público y las universidades han seguido la huelga que pretendía "pararlo todo"; por un 29% en la enseñanza; un 30% el comercio y un 18% el Ayuntamiento de Barcelona.