La recuperación económica de la Unión Europea mantiene un ritmo más lento que en otras etapas comprables debido a la elevada deuda pública. Sin embargo, la contención de los salarios y el crecimiento de sectores intensivos en mano de obra, como los servicios, provocan que la generación de empleo crezca a más velocidad que el PIB.
La devolución de la deuda pública, pese a los bajos tipos de interés de estos momentos, está haciendo que la recuperación del PIB al nivel previo a la crisis sea más lenta de cómo fue en otros ciclos expansivos de la economía. Este lastre es especialmente visible en países como España e Italia, más afectados que otros por la crisis de la deuda soberana.
La prima de riesgo
El Banco de España justifica este análisis en el hecho de que el nivel de la deuda pública roza el 100% del PIB y su prima de riesgo llegó a superar los 600 puntos básicos en el verano de 2012, cuando el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, pronunció la famosa frase de que haría todo lo posible para salvar el euro. Actualmente, la prima se sitúa en torno a los 100 puntos básicos.
El BCE explica que en el área del euro la duración promedio de las expansiones ha sido de 31 trimestres, frente a los 19 trimestres actuales, al tiempo que la intensidad promedio de la recuperación ha sido de 20 puntos porcentuales del PIB y en la fase actual son 9 puntos.
Menos intensidad
Por eso, la expansión observada desde el mínimo alcanzado a comienzos de 2013 todavía es "inferior", tanto en duración como en intensidad del crecimiento al promedio de las fases alcistas de otros ciclos, lo que en principio "parece sugerir la existencia de cierto margen adicional para su prolongación".
A pesar de que la actividad económica del área del euro registró en el primer semestre de 2018 una desaceleración "más intensa" de lo anticipado a finales del año pasado, el PIB del conjunto del área del euro continúa progresando a ritmos superiores que, según distintas estimaciones, crecería a tasas en torno al 1,5%.
Exportaciones e inversión
Tras esta debilidad de la recuperación, añade el Banco de España, se encuentra el "menor dinamismo" que han mostrado todos los componentes del PIB y, en particular, las exportaciones y la inversión empresarial que, para el conjunto del área, alcanzó los niveles precrisis con gran retraso, a finales de 2016.
La actual fase cíclica está siendo "muy intensa" en términos de generación de empleo, como consecuencia, entre otras razones, de la "moderación de los salarios" y de la contribución al crecimiento comparativamente más elevada que están teniendo los sectores más intensivos en el uso del factor trabajo, como los servicios.
La inmigración
Las encuestas de la Comisión Europea entre empresarios señalan la existencia de un porcentaje creciente de empresas que tienen dificultades para encontrar mano de obra, al tiempo que los niveles de utilización de la capacidad productiva alcanzan valores "históricamente elevados" en la mayoría de los países.
El papel que puedan desempeñar los intensos flujos migratorios recibidos en la etapa reciente a la hora de "aliviar un eventual tensionamiento del mercado de trabajo" del área es "incierto", en la medida en que el grado de empleabilidad de estas personas y sus posibles dificultades para integrarse en la población activa son, de momento, "difíciles de estimar".