El Gobierno de la Generalitat ha convertido la ratificación del Acuerdo Interprofesional de Cataluña (AIC) de este lunes por la mañana en otra soflama independentista. En el marco de su política de gestos, el presidente catalán, Quim Torra, ha aplaudido el documento que marca las líneas maestras de todos los convenios colectivos en el territorio como un “ejemplo de diálogo y esfuerzo”. En este caso, entre patronal y sindicatos.
Sobre la transformación que propicia en las relaciones laborales, se ha limitado a señalar que el gran objetivo del Govern es conseguir las “plenas competencias” para diseñar “desde Cataluña las mejores políticas laborales”. “Deberíamos ser la Dinamarca del sur”, ha manifestado en el acto solemne de la ratificación que ha unido a los responsables de Economía, Empresa y Trabajo de su Ejecutivo, Pere Aragonès, Àngels Chacón y Chakir el Himrani, y a los representantes de los agentes sociales.
Acuerdo de julio
A los secretarios generales de CCOO y UGT de Cataluña, Javier Pacheco y Camil Ros, y a los presidentes de Foment del Treball, Pimec y Fepime; Joaquim Gay de Montellà, Josep González y María Elena de Felipe. Todos ellos habían pactado el contenido hasta la última coma del acuerdo laboral a principios de julio. Aunque el acto oficial para ratificar el acuerdo laboral se ha tenido que esperar dos meses.
El AIC describe cuáles deben ser las normas básicas que se deben aplicar en la organización del trabajo. Se trata de recomendaciones, ya que los centros con dificultades en aplicarlas pueden negociar condiciones por debajo. Con todo, estas situaciones son poco usuales ya que suelen llevar a la conflictividad en el diálogo.
Avance en materias laborales
Por primera vez, el documento aborda cuestiones tan importantes en el mercado laboral postcrisis como la precariedad instaurada o la mayor incidencia de la brecha salarial por género. Contempla la limitación de la contratación temporal, la regulación de la flexibilidad, la problemática de las llamadas empresas multiservicio y se intenta poner coto a la “falsa economía colaborativa”. Además de otras cuestiones que afectan a las sociedades modernas como el blindaje a la desconexión digital o la implementación del teletrabajo.
En materia salarial, refleja íntegramente el pacto estatal que los agentes sociales tomaron sobre la materia. La recuperación del 2,1% e iniciar un camino para revisar al alza el salario mínimo interprofesional. El objetivo es fijarlo en los 14.000 euros. Es decir, en 1.000 euros brutos mensuales.
Ámbitos de acuerdo
El AIC ha alcanzado pactos en todos estos ámbitos:
- Estructura de la negociación colectiva.
- Tribunal Laboral de Cataluña.
- Observatorio de la coyuntura económica de la negociación colectiva.
- La ultraactividad de los convenios. Es decir, cuándo decaen.
- Inaplicación de las condiciones establecidas en los convenios colectivos.
- Flexibilidad negociada en materia de tiempo de trabajo, sistema de contratación, criterios salariales y sistemas retributivos.
- Criterios sobre subcontratación y empresas multiservicios.
- Organización profesional, la formación profesional y la promoción.
- Movilidad funcional.
- Movilidad geográfica internacional.
- Participación de la representación de las personas trabajadoras en los procesos de reestructuración.
- Responsabilidad social.
- Igualdad de género y brecha salarial.
- Igualdad del colectivo LGTBI.
- Gestión de la diversidad de origen.
- Discapacidad.
- Absentismo.
- Salud laboral.
- Medio ambiente y sostenibilidad.
- Movilidad sostenible en los centros de trabajo.
- Uso de tecnologías de la información y la comunicación (TIC) y cómo afectan en la destrucción de empleo.
- Desconexión digital.
- Teletrabajo.
- Innovación y nuevas tecnologías
- Digitalización e industria 4.0.
- Pacto Nacional para la Industria.
- Previsión social complementaria.
- Expedientes de regulación de empleo y negociación colectiva.
- Contratación pública.
- Políticas de formación y empleo.
- Economía de plataformas digitales.
- Servicio doméstico.