Josep González, presidente de Pimec, en una imagen de archivo / EFE

Josep González, presidente de Pimec, en una imagen de archivo / EFE

Business

Pimec quiere ganar peso en la Cámara de Comercio de Barcelona

La patronal de pymes catalana busca ser más influyente en la pugna para elegir nuevo presidente y disponer de más representantes en el pleno

12 julio, 2018 00:00

Pimec, la patronal de pymes catalana liderada por Josep González, ha empezado a mover sus fichas para ganar presencia en la futura Cámara de Comercio de Barcelona. Quiere tener más representantes en la institución que salga de las urnas a finales de año, cuando se espera que se celebren los comicios.

Fuentes cercanas al secretario general, Antoni Cañete, explican que su plan es intentar que gente afín a la organización consiga hacerse con una de las 40 sillas del pleno que están reservadas a sectores de la actividad económica local. Las que se votarán en las urnas. Impulsan, asimismo, la candidatura del director ejecutivo de Numintec, José María Torres. El ejecutivo forma parte de la junta directiva de Pimec y ya trabaja activamente para recabar apoyos entre los votantes.

Peso de las grandes empresas

Los mismos interlocutores señalan que la patronal fue muy crítica en su día con la ley que regulaba la representación en la organización de dinamización económica. Cargó contra la creación de una nueva categoría que se incluye en la elección de miembros del plenario y que se valora por las aportaciones económicas. Es decir, que 14 de las 60 sillas de la próxima asamblea (nueve menos que la actual) están reservadas a las grandes empresas.

Pimec consideró que esta representación minoritaria suponía un menosprecio para el tejido pyme. Las fuentes consultadas aseguran que es mayoritario en la ciudad y que tiene necesidades y prioridades distintas a las grandes corporaciones. Este sería el principal motivo que ha llevado a la actual dirección de la patronal a impulsar una estrategia que rompe con la neutralidad que históricamente han mantenido en las elecciones camerales.

Representación patronal

Cabe tener en cuenta que, como patronal con representatividad, puede designar de forma directa a dos personas del próximo pleno de la Cámara. Los mismos que tendrán Foment del Treball y Fepime, las otras dos instituciones con más peso entre el empresariado catalán.

Los portavoces de la organización presidida por Joaquim Gay de Montellà explican que para los futuros comicios a la Cámara de Comercio, ellos sí mantendrán la neutralidad histórica. Los de Pimec han declinado hacer ningún comentario oficial sobre la nueva estrategia que han emprendido.

Voto electrónico

Para que sus objetivos lleguen a buen puerto será crucial la decisión final que tome la consejera de Empresa y Competitividad, Àngels Chacón, sobre los sistemas de votación que se permitirán en las elecciones. Pimec, igual que los independentistas que se organizan alrededor de Enric Crous para presentar su candidatura, esperan que rescate el reglamento que desarrolló el anterior secretario del departamento, Pau Villòria, que habilitaba un sistema electrónico.

El documento que se desarrolló en la anterior legislatura señalaba que el procedimiento de voto con el “uso de medios electrónicos” debía garantizar que no existían coerciones sobre el elector y que no se pudiera relacionar con la persona que lo ha emitido. Con la “identificación plena y fehaciente” y prever que su “voluntad” no era “alterada ni cualitativa ni cuantitativamente” tras participar en los comicios.

Identidad digital

Pero no decía nada sobre una de las cuestiones más polémicas de la medida: si se debe habilitar un sistema propio o si sólo se requerirá la firma electrónica. Si se opta por lo segundo, como la identidad digital no es propiedad exclusiva de las empresas, se teme que los profesionales del ámbito de la gestión puedan movilizar a un gran número de electores. Desde la propia Generalitat reconocen que no hay tiempo para dar forma a una plataforma propia para las elecciones si se quieren celebrar antes de que termine el año.

El Govern está ante una encrucijada y la consejera aún no ha tomado ninguna decisión al respecto. Desde las 13 organizaciones camerales catalanes, se espera algún anuncio al respecto antes de las vacaciones.