El Aerobús, cuyo concurso está siendo investigado por Competencia / CG

El Aerobús, cuyo concurso está siendo investigado por Competencia / CG

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Colau bloquea el nuevo Aerobús porque quiere sacarle más dinero

El Área Metropolitana enmaraña el concurso de la lanzadera al aeropuerto al subirle el canon de explotación a 90 millones

6 marzo, 2018 00:00

Ada Colau bloquea el nuevo Aerobús porque quiere sacarle más dinero. El Área Metropolitana de Barcelona (AMB), que preside la alcaldesa de Barcelona, ha enmarañado el concurso público de explotación del servicio, valorado en 89,5 millones. La licitación acumula varios meses de retraso.

Según han informado fuentes cercanas, la elección del nuevo gestor de la lanzadera al aeropuerto de Barcelona-El Prat está parada porque el AMB ha subido el canon de explotación, haciéndolo inviable. Pide 90 millones de euros a seis años, una oferta que licitantes y sindicatos ven "irreal". Por ello, uno de los aspirantes, Serveis Generals de Transport i Mobilitat (SGTM), el actual titular del servicio, ha recurrido los pliegos del concurso al Tribunal Catalán de Contratos del Sector Público. La empresa participada por TMB y Moventia (49%) y Tusgsal (51%) no es la única irritada: otros grandes del transporte como Alsa, Avanza y Monbús también estarían descontentas, según las mismas fuentes.

"Efectos sobre la polución y pasajeros"

Varios son los efectos de ese enconamiento del AMB con el Aerobús. Fuentes cercanas al concurso recuerdan que "la no renovación del servicio supone no poder poner límites a la contaminación con vehículos más nuevos". De hecho, los pliegos de contratación especifican que el nuevo gestor debe poner 30 autobuses nuevos a operar --una renovación total de flota--, algo que echa para atrás a varias empresas. "¿Quién las rentabilizará si después no renovamos?", se preguntan voces cercanas a la licitación. Lo mismo ocurre, por ejemplo, con los paneles informáticos de obligada instalación en las paradas: su rentabilidad es dudosa.

A ello, además, se le une el perjuicio al pasajero. El nuevo Aerobús estaba pensado para operar las 24 horas de forma ininterrumpida al aeropuerto de El Prat. Con la parálisis del concurso, nadie sabe cuándo empezarán barceloneses y turistas a disfrutar de esa mejora. Actualmente, el servicio funciona de cinco de la madrugada a una de la madrugada.

Negocio de oro

El punto clave del conflicto es quién se reparte el pastel de un negocio millonario. Más de 5,5 millones de personas utilizan la lanzadera por carretera al aeropuerto cada año. El servicio suma más adeptos, por ejemplo, que la flamante línea L9Sud del metro de Barcelona, que se queda en poco más de tres millones de viajeros por ejercicio.

Las cifras de clientes generan una suculenta cuenta de resultados. SGTM, el gestor desde 2010, presentó un beneficio bruto de explotación de 7,1 millones (+0,4%) de euros en el último ejercicio presentado, que fue 2015. Los ingresos totalizaron 28,8 millones de euros, el 7,83% más respecto al ejercicio anterior.

Preguntados por la cuestión, SGTM y Transports Metropolitans de Barcelona han dirigido a este medio al AMB. El organismo supramunicipal no ha contestado a los requerimientos informativos, igual que Moventia.