El empresariado tira de las orejas a Colau por su actitud en la Fira de Barcelona

El empresariado de Barcelona ha dado un toque de atención a la alcaldesa de la ciudad, Ada Colau, por el camino que ha emprendido en la renovación del consejo de administración de la Fira de Barcelona. Un proceso que culminará la elección de un nuevo presidente del órgano directivo y con la salida de la institución de la persona que lleva en el cargo desde 2004, Josep Lluís Bonet.

En un momento en que la líder de BComú se resiste incluso a convocar el consejo de administración que se debe celebrar antes de finales de año, tal y como indican los estatutos de la sociedad, ha sido el propio Bonet y el presidente de la Cámara de Comercio de la ciudad, Miquel Valls, los responsables de hacerle llegar de forma pública y notoria el mensaje del empresariado en una conferencia convocada por el órgano de dinamización empresarial con el también líder de Freixenet como invitado.

Ha tomado nota de ello Agustí Colom, el concejal de Empresa y Turismo desde que BComú rompió con el PSC el pasado fin de semana y que estuvo presente en el acto.

La Cámara convoca pleno extraordinario

Y el papel de Valls en la renovación es básico. La Cámara es la que debe proponer formalmente a los candidatos que acceden al consejo de Fira y al nuevo presidente. Así lo harán en el pleno extraordinario cameral que se celebrará el próximo 23 de noviembre, tal y como adelantó Crónica Global. Ha sido convocado este martes con un único punto en el orden del día: abordar la renovación de la directiva.

“Fira Barcelona ha logrado unos resultados históricos desde hace años gracias a la colaboración de los empresarios y los ejecutivos que han participado en el consejo”, manifestó Valls en la conferencia. Y en este éxito tiene mucho que ver, según su punto de vista, que hayan podido tomar las decisiones que creyeron más oportunas “sin ninguna injerencia política”. Algo que se pone en duda en el momento actual.  

Cambio de equipo de gobierno en diciembre

“Debemos aprender la lección de que el modelo de Barcelona, el de la colaboración público-privada, funciona; ahora no debemos estropearlo”, añadió Bonet. Remitió a renglón seguido otro mensaje a la alcaldesa: “Nosotros estamos prorrogados y si no hay consenso entre las tres instituciones que lideran Fira --la Cámara de Comercio, el ayuntamiento y la Generalitat-- sólo puede haber una prórroga”.

Por lo que en el “próximo consejo general se debe cambiar de forma necesaria” el equipo de gobierno. Y eso debe ocurrir en diciembre porqué “así lo dicen los estatutos, que nos reuniremos en julio y en diciembre”. El mandato termina por fuerza en ese momento.

Retos que se deben defender

Incluso marcaron cuáles deben ser los retos del próximo presidente que se ponga al frente de la institución: la internacionalización y la digitalización. “La Cámara está totalmente de acuerdo con esto, espero que las instituciones también”, advirtió Valls.

“La crisis ha pasado y hay otros que vienen muy fuertes”, explicó Bonet. ¿Qué se debe hacer? El empresario marcó la necesidad de trabajar para la “estabilidad, la seguridad jurídica y la normalidad”, una petición más en línea de pasar página a la incertidumbre generada con el proceso independentista catalán, y dar continuidad a la línea ejecutiva actual. “Vamos muy por delante de los demás, no lo estropeemos”, añadió.

Kim Faura, el candidato de la Cambra y la Generalitat

Colau y los empresarios de Barcelona se deben poner de acuerdo y están en tiempo de descuento. La alcaldesa conoce que el candidato de la Cámara de Comercio que contaba con el visto bueno de la Generalitat antes de que llegara la declaración de independencia simbólica y la aplicación del artículo 155 es Kim Faura, el director general de Telefónica en Cataluña, Comunidad Valenciana, Islas Baleares y Región de Murcia.

El ayuntamiento se resiste a su elección. La candidata preferida de BComú era Helena Guardans, de Sellbytel, que entrará como consejera en Fira pero que ya ha manifestado que no está dispuesta a asumir la presidencia de la institución. En un primer momento, Colau promocionó a Miquel Martí, el propietario de Moventia, uno de los principales proveedores del consistorio y consejero de perfil político independentista. Pero su nombre decayó por la falta de acuerdo y propició la única prórroga permitida del mandato de Bonet.

Ocho días para llegar a un acuerdo

“Los políticos deben escuchar a los empresarios, debemos trabajar todos juntos”, declaró el actual presidente del consejo de Fira.

Cuentan con ocho días para mantener la unanimidad que desde el 2000 ha existido entre empresarios e instituciones en Fira Barcelona. Los años dorados de la institución. Así lo recordaron Valls y Bonet al plantarse de forma pública ante la alcaldesa.