La aventura del 22@ de Barcelona

En el año 2004, el Ayuntamiento de Barcelona, entonces comandado por el socialista Joan Clos, inició un proyecto empresarial con Mediapro que, 12 años después, sólo ha generado pérdidas para las arcas municipales. Una aventura que se explica por el plan del consistorio de reconvertir el antiguo suelo industrial del Poblenou en un polo tecnológico, el distrito 22@.

El Ayuntamiento firmó con Mediapro la creación de una empresa mixta vinculada al sector audiovisual. Para ello, aportó la cesión durante 75 años de un inmueble valorado en 75 millones de euros, a cambio de una participación minoritaria en la nueva sociedad, mientras el grupo de Jaume Roures aportaba 13,5 millones de euros, según documentación del propio Ayuntamiento. La sociedad resultante ha generado desde entonces más de medio millón en pérdidas para el Ayuntamiento, además de una deuda en su favor de dos millones que Mediapro no pagará hasta que la empresa se vuelva rentable.

Luces y sombras

En la parte positiva, el proyecto ubicó en la zona un grupo audiovisual de peso, la propia Mediapro. Con otros estímulos desde el consistorio, o por el propio 'efecto llamada', desde entonces se han ubicado en el 22@ gigantes tecnológicos como Yahoo, Microsoft o Indra, amén de toda una serie de compañías menores. A fecha de hoy, la Asociación de Empresas e Instituciones 22@Network agrupa a 97 compañías presentes en la zona.

También hay puntos negros. Telefónica eligió situarse algo más allá de la zona promovida por el Ayuntamiento, en Diagonal Mar. Tampoco se han cumplido –cuantitativamente– los ambiciosos objetivos de creación de nuevo empleo de alta tecnología en la zona, y parte del suelo. Y los críticos con el modelo señalan igualmente que el cambio de modelo ha comportado la desaparición de lo que quedaba del pequeño y mediano sector industrial tradicional de la zona.