Pagar hasta el 4.500% TAE por un crédito rápido
Facua denuncia el cobro de sumas desproporcionadas y no explícitas por préstamos de pequeñas cantidades a corto plazo
30 diciembre, 2015 13:51Las webs de créditos rápidos pueden cargar unos intereses de hasta el 4.500% TAE, según un estudiado realizado por Facua-Consumidores en Acción sobre entidades de créditos rápidos para préstamos de pequeña cuantía a devolver en un mes.
Ocho de las diez empresas analizadas no especifican los intereses de forma clara y comprensible, lo que vulnera la legislación, según la asociación. La tasa anual equivalente (TAE) recoge todos los conceptos que se pagan, junto a los intereses, por un préstamo.
Denuncias por usura
Facua ha anunciado la presentación en los próximos días una batería de denuncias por usura ante las autoridades autonómicas de protección al consumidor y recuerda que el usuario está amparado por la ley de la usura que sanciona determinadas situaciones de la contratación, dado que pueden suponer una lesión grave de intereses jurídicamente protegidos o un perjuicio económico injustificado.
A su vez, la asociación recuerda que los créditos rápidos no cuentan con definición legal alguna ni regulación diferente a la establecida en la legislación sobre créditos y protección al consumidor.
Intereses desproporcionados
En general, los intereses que se aplican son "absolutamente desproporcionados" en la mayoría de los créditos de iguales características. En el caso de solicitar 300 euros a devolver en 30 días, para Twinero los intereses son de un 3.752%; un 2.969% TAE para sucredito.es; un 2.424,60% TAE en el caso de ¡Qué bueno!; 2.333,95% TAE para Ok Money; 1.309% TAE de creditomovil.es y Ferratum; o un 1.269,70% TAE en el caso de Vivus.es, entre otros.
Por su parte, Cetelem y Cofidis ofrecen una TAE de 17,75% y 24,51% respectivamente para un crédito de 4.000 euros en 12 cuotas.
Algunos no son bancos
Facua advierte que algunas de las empresas que comercializan este tipo de productos no son entidades financieras y que por ello deben estar bajo la supervisión de las autoridades de consumo de las comunidades autónomas, pero no bajo el control del Banco de España ni de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Este estudio también refleja una información incompleta en el caso de muchas de las webs de entidades que, sin embargo, permiten contratar créditos de manera casi automática.