No se esconde: es de UGT. Habla de parte, y no lo oculta. "Miembro de la sección sindical del Institut d'Assistència Sanitària (IAS, segundo hospital público de Girona tras el Josep Trueta) y del comité de empresa", enumera. Se ha dirigido al presidente catalán, Quim Torra, amén de a otros políticos, para ponerles deberes. Lo ha hecho cuando en el IAS empieza a bajar el flujo de pacientes con Covid-19, la infección que causa el virus SARS-CoV-2. El hospital se recupera y los médicos también: el IAS, también llamado Santa Caterina, fue uno de los hospitales peor parados de España, copando hasta el 30% de infectados de la provincia.

Ahora, cuando la presión asistencial remite, Jordi escribe una carta al president. "En estos momentos que estamos viviendo, la sociedad nos tilda de héroes, nada mas lejos de la realidad, sencillamente somos trabajadores completamente implicados en nuestro quehacer diario", explica. Agrega que lleva 25 años de auxiliar clínico en el hospital. ¿Qué le pide a Torra? "No creo que sea el momento oportuno para pedir ni aumentos de sueldo ni nada por el estilo, pero si encuentro oportuno recordarles que como personal laboral de una entidad pública perteneciente a una autonomía desde hace mas de 10 años, estamos sufriendo el Real Decreto-ley 8/2010 y el  Decret Llei 3/2010 de la Generalitat de Cataluña [consultar aquí]. Creo sinceramente hace tiempo deberían de haber sido derogados".

Diez años sin el 5% de sueldo

En un momento en el que algunos círculos plantean una paga extra para los sanitarios por su coraje en la lucha contra la pandemia, como el que ha aprobado el Gobierno de Emmanuel Macron en Francia o la que ha pedido Pablo Casado, presidente del PP, Jordi lo matiza. "No es momento de aumentos de sueldo". "Lo que toca --dice-- es devolver a los médicos, enfermeros, técnicos, camilleros, auxiliares y demás personal lo que nos recortaron en 2010". Lo que recortaron, en Cataluña, fue un descenso gradual de entre el 0% y el 7% de sueldo al personal funcionario, estatutario y laboral, con una media del 5%. Además de un hachazo del 5% al complemento específico.

Era momento de actividad económica menguante por la crisis y caída de la recaudación fiscal. Cataluña no se libró de los ajustes, al contrario, los ejecutivos de Artur Mas ajustaron presupuesto como pocos. Hace diez años de aquello. "Estos decretos nos hicieron sentir como parte del problema de la mal llamada crisis económica. Unos decretos que como tales tenían carácter temporal y resultaron tener una duración de mas de 10 años, 25 para las personas que se jubilen", recuerda Jordi. Su única petición tiene base legal: el Parlament aprobó una moción en octubre de 2019 que insta al Govern a restituir la nómina a los funcionarios públicos a como estaban antes de los recortes. Nunca se cumplió, como tantas otras cosas en Cataluña.

"Nadie se echó para atrás"

En su carta al president Torra, pero también a Roger Torrent, presidente del Parlament y a otros políticos, Jordi recuerda que "los momentos que nos ha tocado vivir como personal sanitario están siendo muy duros, tanto física como mentalmente". Enfatiza que "han sido momentos de falta de material para nuestra protección, momentos de incertidumbre, momentos de miedo, momentos donde no podías dejar de pensar en la salud de tu familia y en la de tus allegados cuando volvías a casa sin tener la certeza de no contagiarlos".

Subraya el auxiliar de clínica que durante el pico de pandemia, que ya ha pasado según el Ministerio de Sanidad y la Consejería catalana de Salud, "nadie se echó para atrás" pese a la "falta de material". "Se tiró de ingenio e imaginación para cumplir con nuestro deber. Por eso les pido encarecidamente que nos devuelvan lo que nos pertenece", concluye.