Carteles por los derechos de la mujer en una manifestación / EFE

Carteles por los derechos de la mujer en una manifestación / EFE

Vida

Radiografía de los derechos de la mujer: de la India a Arabia Saudí

Prácticas como la mutilación genital femenina o el destierro de las viudas siguen siendo una realidad en algunas partes del planeta

5 marzo, 2019 00:00

El 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, una fecha que instauró Naciones Unidas en 1975 para conmemorar la lucha por la igualdad de derechos entre ambos géneros. Pero el papel del sexo femenino en la sociedad sigue sin alcanzar la plena paridad.

Esta situación de desigualdad es todavía más acuciante en algunas partes del mundo, en las que se llevan a cabo prácticas como la mutilación genital femenina, el destierro de las viudas como si estuvieran muertas en vida, o la lapidación de las que mantentien relaciones extramatrimoniales o son víctimas de una violación.

Viudas en la India

Ser viuda en la India es una de las peores condenas, en mucho casos significa estar muerta en vida. De hecho la localidad de Vrindavan --conocida como “la ciudad de las viudas”-- alberga a aquellas mujeres cuyos esposos han muerto. No solo son desterradas sino que se les rapa el pelo, tienen que vestir siempre de blanco --el color del luto en el país--, y se les despoja de todas sus pertenencias. Además, se las considera un símbolo de mal augurio y son repudiadas, no solo por la sociedad, sino por sus propias familias.

Aún hay más. En la Edad Media se practicaba en el territorio del sur de Asia un ritual conocido como Satí que consistía en quemar vivas a las viudas tras arrojarlas sobre la pila funeraria donde se depositaba el cadáver del marido --según la tradición hindú, la vida de la mujer no tiene sentido más allá de la de “su hombre"--. A pesar de que esta atrocidad se prohibió en 1829, se ha seguido practicando, como ocurrió con Roop Kanwar en 1.987, una joven de 18 años que solo estuvo casada durante ocho meses, o con Janakrani, de 45 años, hace poco más de una década.  

Matrimonios forzados en Asia y Pacífico

Las mujeres también son víctimas de matrimonios forzados, no solo en la India, sino en otras zonas de Asia y el Pacífico. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha tipificado esta práctica como una forma de esclavitud moderna, cuyas víctimas son del género femenino en más del 84% de los casos. 

De hecho, según un informe de la ONG Plan Internacional, unos 150 millones de niñas corren el riesgo de casarse antes de 2030. La asociación advierte ante lo alarmante de los datos --más de la mitad de las menores contrae matrimonio antes de los 15 años en Bangladesh, mientras que en Camboya la proporción roza el 20%-- y que el matrimonio infantil es una lacra para el desarrollo psicológico, físico y social de las niñas. 

Mutilación genital femenina en África

Según las estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 100 millones de niñas y mujeres en todo el planeta han sido sometidas a mutilación genital femenina. En África, más de 90 millones de mujeres y niñas con más de nueve años sufren las consecuencias de esta práctica.

Mutilación genital femenina / EFE

Mutilación genital femenina / EFE

Una vícitma de mutilación genital femenina / EFE

En el continente, son 3 millones de menores las que, cada año, corren el riesgo de ser sometidas a una ablación. Las víctimas sufren no solo dolor intenso, hemorragias, infecciones, y problemas urinarios que pueden arrastrar durante toda su vida, sino que corren el riesgo de morir, tras ser sometidas a esta brutalidad.

Autorización de un varón en Arabia Saudí

¿Recuerdan cuando en España aún era necesario el permiso del padre o del marido para obtener el Documento Nacional de Identidad (DNI) o abrir una cuenta bancaria?  Suena lejano, pero esta normativa estuvo vigente hasta 1975 en nuestro país, y aún lo está en Arabia Saudí, donde las mujeres necesitan la autorización de un varón para buscar empleo, viajar, casarse o matricularse en un centro de enseñanza. Aunque el Rey Salmán aprobó un decreto para que ya no fuese necesario ningún permiso, parece que la norma no ha acabado de hacerse efectiva.

Conducir

El monarca también promulgó otro decreto en junio de 2018 para permitir al género femenino conducir vehículos --tras 60 años de prohibición--, pero el documento hace alusión a que su aplicación seguirá “las normas legales establecidas” lo que no augura muchos avances al respecto. Hubo más reformas: la autorización para poder iniciar un negocio propio, así como optar a la custodia de los hijos en caso de divorcio, pero organizaciones de derechos humanos sostienen que estas medidas quedan en papel mojado para lavar la cara del régimen.

Una mujer al volante en Arabia Saudí el pasado junio / RTVE

Una mujer al volante en Arabia Saudí el pasado junio / RTVE

Una mujer al volante en Arabia Saudí el pasado junio / RTVE

Según denuncia Amnistía Internacional, el pasado abril una activista de 29 años, Maryam al Otaibi, fue detenida en Riad por participar en la campaña que pedía acabar con el sistema de tutela masculina impuesto en el país. ¿El motivo del arresto? Una denuncia de su progenitor por abandono del hogar. Un hecho que demostraría que la igualdad de derechos está muy lejos de alcanzarse en el territorio.

Lapidaciones por adulterio en Pakistán, Irán y Afganistán

Otro caso flagrante de violación de los derechos humanos es el de las lapidaciones por adulterio en IránAfganistán --aunque también se han registrado casos en otros países como Somalia y la India--. El Código Penal de la república islámica del golfo Pérsico incluye esta pena capital a base de pedradas en caso de que una mujer sea condenada por mantener relaciones extramatrimoniales. Este no es el único supuesto por el que se las condena a muerte, ya que ser víctima de una violación también se considera adulterio

En el caso de Pakistán abandonar el hogar puede ser motivo suficiente para morir a pedradas, sobre todo si la mujer reside en una zona que está bajo control talibán. En Afganistán también supone cometer un delito mantener relaciones prematrimoniales con el prometido. Eso sí, la única condenada a morir de forma brutal es ella.