Coche de los Mossos d'Esquadra en el que trasladaron al asesino / EP

Coche de los Mossos d'Esquadra en el que trasladaron al asesino / EP

Vida

Prisión para un joven que asesinó al vigilante de un prostíbulo y violó a una trabajadora

El acusado, que se enfrenta a una pena mínima de 38 años de cárcel, se ha acogido a su derecho a no declarar

16 septiembre, 2020 19:02

El juzgado de Instrucción 2 de Sant Feliu de Guíxols ha decretado prisión comunicada y sin fianza para el joven acusado de asesinar al vigilante de un prostíbulo de Platja d'Aro y violar dos veces a una de sus trabajadoras la madrugada del pasado 13 de septiembre.

Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), la causa está abierta por un delito de asesinato y un delito de agresión sexual, aunque la fiscalía entiende que los hechos podrían ser legalmente constitutivos, también, de los de tenencia ilícita de armas, detención ilegal en concurso ideal y dos más de violación.

Se enfrenta a una pena de 38 años

El detenido, un joven de 30 años, vecino de Calonge y de nombre Daniel, ha sido puesto a disposición judicial esta mañana y se ha acogido a su derecho a no declarar. La pena mínima en este caso supondría más de 38 años de cárcel, dado que al asesinato y a las violaciones se le sumaría el retener a la prostituta contra su voluntad.

Diversas cámaras de vigilancia grabaron al sospechoso la noche de los hechos: desde las de la Policía Local, que recogieron cómo circulaba en dirección al prostíbulo, como las de ese establecimiento, tanto a su llegada como al abandonarlo junto a la mujer y al vigilante.

Todo conducía hacia el sospechoso

El pasado 13 de septiembre, sobre las 7.13 horas, unos cazadores llamaron a la Policía Local de Calonge e informaron del hallazgo de un cadáver que presentaba un disparo en el tórax. Sobre la misma hora, un vecino del municipio denunció la desaparición de su moto, su turismo y su escopeta del calibre 12 además de apuntar que su hijo, Daniel, tampoco se hallaba en el domicilio.

A lo largo de la misma mañana, una mujer de origen asiático acudió a dependencias policiales para manifestar que había presenciado un asesinato --el del vigilante, un hombre de 38 años y nacionalidad española--, y aseguró haber sido violada en dos ocasiones --una vaginal y otra oralmente-- por el autor del crimen. 

Con todos estos datos, los Mossos d'Esquadra abrieron una investigación que rápidamente relacionó los tres episodios. Salieron en busca del sospechoso y, sobre las diez de la mañana, lo localizaron en su propia casa. Tras revisar las cámaras de seguridad, pudieron demostrar su implicación en los tres sucesos.

La mujer escapó en un descuído

Según la investigación, una pelea en un bosque --lugar donde el detenido pretendía mantener relaciones sexuales con la prostituta sin pagar los servicios-- acabó con en el disparo de escopeta que mató al vigilante. Acto seguido, el acusado procedió a la violación, que se produjo supuestamente con tanta violencia que derivó en lesiones físicas. 

La mujer estuvo privada de libertad desde las 2.30 horas de la madrugada, aproximadamente, hasta las siete de la mañana del día del suceso, cuando aprovechó que el presunto asesino había salido a hacer sus necesidades para escapar y acudir a comisaría.